Frases de Noel Clarasó ( 3 )

Hay dos clases de virtudes: las que hacen ganar el cielo y las que hacen ganar la tierra.

El mejor modo de resolver una dificultad es no tratar de soslayarla.

La misión del escritor no consiste en decir lo que piensa, sino en decir lo que los otros creen que han pensado alguna vez.

El amor es el único deporte que no se interrumpe por falta de luz.

Hay mucha gente que cuando ha de hacer algo, hace algo; aunque no sea exactamente lo que ha de hacer.

Indudablemente la época más feliz del matrimonio es la luna de miel; lo malo es que para repetirla, han de suceder cosas muy desagradables.

La conciencia es como un huésped pesado que grita siempre, pero con el que, salvo en algunos casos gravísimos, uno termina por entenderse.

Solo un buen amigo es capaz de comprender que su presencia puede llegar a molestarnos.

El hombre se dedica a desear en voz alta aquello que jamás se esfuerza en alcanzar.

En cada amanecer hay un vivo poema de esperanza, y, al acostarnos, pensemos que amanecerá.

El cuerpo, si se le trata bien, puede durar toda la vida.

Hay que tener en cuenta que aunque el hombre se siente capaz de todo por amor, el amor no aumenta en nada la habilidad personal.

A veces más vale callar y pasar por tonto, que abrir la boca y demostrarlo.

muchos gritan y discuten que el otro calla que le han convencido y se equivocan siempre
Dar la espalda a la sombra y volver el rostro a la luz, por débil que sea. Busca siempre un camino de salvación, una zona de bienestar, un medio de seguir adelante. Nunca se deja de hallarlos

El buen marido ama el hogar, como los buenos marinos aman el mar: a pesar de las tormentas.

La felicidad se parece a las corbatas; cada uno escoge el color de la suya

Suprimir toda palabra inútil. Simplificar la frase. Simplificar la idea. Suprimir, suprimir. Esta es la fórmula para escribir bien, y para hacerlo todo bien

La amistad supone sacrificios y solo el que está dispuesto a hacerlos sin molestia comprende la amistad

Contemplar cómo los demás trabajan es una manera muy sana de amar el trabajo