Paciencia muchas veces ofendida trastorna el juicio.
Séneca
Tu soñar me envolvía, soñado me sentí.
La victoria es por naturaleza insolente y arrogante.
Recibe este rostro mío, mudo, mendigo. Recibe este amor que te pido. Recibe lo que hay en mí que eres tú.
El detalle de una batalla lo da el que triunfa.