El verdadero tesoro del hombre es el tesoro de sus errores.
José Ortega y Gasset
Ahora incluso sus enemigos habían perdido el interés por él. ¿Qué signo más claro de fracaso que ése?
Tengo una filosofía simple: llenar lo está vacío. Vacíe lo que está lleno. Rascar donde pica.
Sé flexible como un junco, no tieso como un ciprés
Los odiadores debieran ser declarados traidores a la república. El odio no construye.