Friedrich Nietzsche: Su espíritu había perecido a...

Su espíritu había perecido ahogado en su compasión; y cuando engrosaba y se desbordaba su compasión, siempre sobrenadaba una gran estupidez.
Friedrich Nietzsche
Más frases

La seriedad es el último refugio de los superficiales.

La justicia no espera ningún premio. Se la acepta por ella misma. Y de igual manera son todas las virtudes.

Siempre he podido trabajar con cualquiera que no deseara éxito.

Ayer pasó Dios por mi puerta y me miró a los ojos (nunca lo había visto de aquel modo inquisitivo). Hizo que repitiera el nombre que llevo entre los labios: era tu nombre, amor.