Uno debe saber vivir con el dinero que tiene.
José de San Martín
¡Ah, no, así no! llorar es demasiado fácil. Eso ya lo he hecho yo mil veces y no sirve de nada. ¡no te pido lágrimas! ¡lo que quiero son árboles!.
Lo más sabio es el tiempo, porque esclarece todo.
Grita un alcaudón, tanto así el corazón de la mujer.
Yo, como don Quijote, me invento pasiones para ejercitarme.