Érase un hombre que amaba a su hijo más que a la vida. Érase un niño que amaba a su padre más que a la muerte.
Orson Scott Card
Voy a dibujar, a cien años luz, la mueca que pintas cuando llego, voy a sobornar, clavarme una cruz, con tal de inspirarte un hasta luego, voy a caminar en el fuego, para que me quieras como quiero
Mi família era totalmente no-religioso. No había duda de que éramos judíos, pero no estábamos atentos.
El cuidado de su salud física y mental es tan importante como cualquier cambio de carrera o la responsabilidad.
Nadie es libre si no es dueño de sí mismo