No hay accidente, por desgraciado que sea, del que los hombres hábiles no obtengan provecho.
Francisco de La Rochefoucauld
La alegría de ver y entender es el más perfecto don de la naturaleza.
No hay presente: todos los caminos son recuerdos o preguntas.
Renunciar a nuestra libertad es renunciar a nuestra calidad de hombres, y con esto a todos los deberes de la humanidad.
Escribo novelas para recrear la vida a mi manera.