Lo que los fascistas odian por encima de todo, es la inteligencia.
Miguel de Unamuno
Allí se levantaría enseguida, para su ronda matinal: pisar la tierra húmeda todavía del relente nocturno, respirar aire recién nacido, ver ensancharse la aurora por el cielo, escuchar los pájaro...
Todavía me gusta jugar a juegos que tienen un principio, un fin y una historia.
Para despojar a un hombre de todas las lealtades, pero esas al Estado, lo que no solo un gusano, sino un monstruo hace que, sin una pizca de humanidad.
Queremos una Argentina pacífica, poderosa y soberana y una masa de trabajadores unida y feliz como ninguna en el mundo. queremos el bienestar de los trabajadores, la dignificación de los humildes y ...