Vladimir Nabokov: ... El dolor quedó en mí, y ...
... El dolor quedó en mí, y a partir de entonces ella me hechizó, hasta que, al fin, veinticuatro años después, rompí el hechizo encarnándola en otra.
Vladimir Nabokov
... El dolor quedó en mí, y a partir de entonces ella me hechizó, hasta que, al fin, veinticuatro años después, rompí el hechizo encarnándola en otra.
Vladimir Nabokov