Las grandes pasiones son enfermedades incurables. Lo que podría curarlas las haría verdaderamente peligrosas.
Johann Wolfgang Von Goethe
Lo peor de los complejos de inferioridad es que los tienen las personas equivocadas.
Son los inocentes y no los sabios los que resuelven las cuestiones difíciles.
La conciencia vale por mil testigos.
El ardimiento juvenil en sus comienzos es fogoso, pero languidece fácilmente y no dura; es el humo de una fogata liviana.