Pregúntate si eres feliz y dejarás de serlo.
John Stuart Mill
El honor que se vende, aunque se dé muy poco por él, siempre se paga más de lo que realmente vale.
Tengo tres perros peligrosos: la ingratitud, la soberbia y la envidia. Cuando muerden dejan una herida profunda.
Solo a partir de mi mente puedo transformar al paraíso en infierno o al infierno en paraíso
Tenía tan mala memoria que se olvidó de que tenía mala memoria y se acordó de todo.