La esperanza es la segunda alma del desdichado.
Johann Wolfgang Von Goethe
Inundación
El río trajo troncos y lúbricos helechos:
la creciente mantuvo mi memoria anegada.
La inundación es gris. La niebla húmeda nada
entre ruinas y patos y lúgubres desechos.
Mundos roto...
Perfume
Vuelvo a tenerte, amor,
como si nunca
te me hubieras ido.
Tus manos me recorren
el rostro suavemente,
y te oigo la voz en un
susurro
que me roza el oído.
Vuelvo a tenerte
y pienso en el pe...
Lo único que necesitamos para convertirnos en buenos filósofos es la capacidad de asombro.
El miedo a la muerte me mantiene vivo.