De ninguno has de decir lo que de ti no quieras decir.
Refrán
Hay que estirar el pies hasta donde llegue la sábana.
El verdadero combate empieza cuando uno debe luchar contra una parte de sí mismo. Pero uno solo se convierte en un hombre cuando supera estos combates.
¡he perdido mi gotita de rocío!, dijo la flor al cielo del amanecer, que había perdido todas sus estrellas.
La luna, la nieve, y ahora a través de la llovizna, ¡la luz de la mañana!.