Los sueños se van con la noche. Y tan solo queda una bruma lejana e inatrapable.
Osvaldo Soriano
El gato no nos acaricia, se acaricia contra nosotros.
Estoy en Kioto Pero al canto del hototogisu Soñando de Kioto.
Cena
Una historia de ayer traza tu fino
labio en carmín, y es hoy en tus ojeras.
Y hay un collar de olvidos y de esperas
si se yergue tu cuello alabastrino.
Las orquídeas ensayan tu destino
en un h...
En el amor no existe el libre albedrío, nadie puede decidir de quién va a enamorarse.