El carácter es para el hombre su destino
Heráclito
Mi corazón, como una lata de cerveza que te la bebes y al final le das patadas sin pensar que me desquicias la cabeza.
Herir a un oponente es herirte a ti mismo. El arte de la paz es controlar la agresión sin producir daños.
Templanza: no comáis hasta el hastío, ni bebáis hasta perder el sentido.
Los hombres vulgares solo piensan en cómo pasar el tiempo. Un hombre inteligente procura aprovecharlo