Quien vive sin pensar, no puede decir que vive.
Pedro Calderón de la Barca
Cuando se es amado, no se duda de nada. Cuando se ama se duda de todo.
Para destruir las malas prácticas, la ley es mucho menos útil que los esfuerzos individuales.
No puede haber gracia donde no hay discreción.
En el proceso de la escritura la imaginación y la memoria se confunden.