Pide consejo al que sabe corregirse a sí mismo.
Leonardo Da Vinci
Dos es compañía, tres multitud.
Donde hay justicia no hay pobreza.
La gente a la que se honraba en La Biblia eran los falsos profetas. Aquellos a quienes nosotros llamamos los profetas era a quienes se encarcelaba y mandaba al desierto, y de allí en más.
El olmo tiene bellas ramas, pero no da fruto.