Quién tuviera el poder, de lograr detener, al amor que se va, se va.
Eladia Blazquez
Manchada deja su vida el que procura muerte.
Como es la madre, así es la hija.
A veces podemos aprender más de los errores de un hombre que de sus virtudes.
Hay dos clases de revolucionarios; los unos desean la revolución y la libertad: son los menos; los otros quieren la revolución y el poder: son la inmensa mayoría.