Nosotros exageramos la desgracia y la felicidad por igual. Nunca estamos tan mal o tan felices como nosotros decimos que somos.
Honore de Balzac
El que llora de verdad, llora más que lágrimas.
Es en el último cuarto de siglo o treinta años. Y mucha de esa ley ha resultado ser muy, muy protector con la prensa y el derecho del público a saber.
Hay acentos en el ojo que no se encuentran en la lengua, y más cuentos provienen de los labios pálidos de lo que puede entrar en un oído. Es a la vez la grandeza y el dolor de los estados de ánimo...
Hay muchas razones para pensar ISRS contundente su capacidad para quedarse y permanecer en el amor.