Colección de paco

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Ahora Que Ya No Soy Más Joven

Ahora que ya remonto la mitad del camino de mi vida,
yo que siempre me apené de las gentes mayores,
yo, que soy eterna pues he muerto cien veces, de tedio, de agonía,
y que alargo mis brazos al sol en las mañanas y me arrullo
en las noches y me canto canciones para espantar el miedo,
¿qué haré con esta sombra que comienza a vestirme
y a despojarme sin remordimientos?
¿Qué haré con el confuso y turbio río que no encuentra su mar,
con tanto día y tanto aniversario, con tanta juventud a las espaldas,
si aún no he nacido, si aún hoy me cabe
un mundo entero en el costado izquierdo?
¿Qué hacer ahora que ya no soy más joven
si todavía no te he conocido?

Piedad Bonnett

Los libros son las abejas que llevan el polen de una inteligencia a otra.

James Russell Lowell

Cada obra de amor, llevada a cabo con todo el corazón, siempre logrará acercar a la gente a Dios.

Madre Teresa de Calcuta

Busca la ignorancia y te encontrará, busca la verdad y a Dios conocerás.

Jaime Tenorio Valenzuela

Solamente la existencia de Caín nos hace amar a Abel.

Séneca

La regeneración en el cine es tan importante como mudar el aire de los pulmones, cambiar los números de un circo o las obras de un museo.

Juana Sánchez-Gey

Ambición

¡Quisiera ser viento!
Ráfaga tendida
que arrastra en su beso
el polvo y la nube,
la rosa, el lucero...
-No brisa apacible
que finge despechos
y siembra caricias-.
Yo quiero ser fuego,
volcán de aire rojo
que incendie el secreto
de todas las ramas
y todos los pechos;
aquilón desnudo,
huracán de acero,
fragua donde forjan
su actitud los cuerpos.
¡Cuando voy a ti,
quisiera ser viento
para arrebatarte
más allá del cielo!

Ernestina de Champourcín

Al Cielo

El puro azul ennoblece
mi corazón. Solo tú, ámbito altísimo
inaccesible a mis labios, das paz y calma plenas
al agitado corazón con que estos años vivo.
Reciente la historia de mi juventud, alegre todavía
y dolorosa ya, mi sangre se agita, recorre su cárcel
y, roja de oscura hermosura, asalta el muro
débil del pecho, pidiendo tu vista,
cielo feliz que en la mañana rutilas,
que asciendes entero y majestuoso presides
mi frente clara, donde mis ojos te besan.
Luego declinas, ¡oh sereno, oh puro don de la altura!,
cielo intocable que siempre me pides, sin cansancio, mis besos,
como de cada mortal, virginal, solicitas.
Solo por ti mi frente pervive al sucio embate de la sangre.
Interiormente combatido de la presencia dolorida y feroz,
recuerdo impío de tanto amor y de tanta belleza,
una larga espada tendida como sangre recorre
mis venas, y solo tú, cielo agreste, intocado,
das calma a este acero sin tregua que me yergue en el mundo.
Baja, baja dulce para mí y da paz a mi vida.
Hazte blando a mi frente como una mano tangible
y oiga yo como un trueno que sea dulce una voz
que, azul, sin celajes, clame largamente en mi cabellera.
Hundido en ti, besado del azul poderoso y materno,
mis labios sumidos en tu celeste luz apurada
sientan tu roce meridiano, y mis ojos
ebrios de tu estelar pensamiento te amen,
mientras así peinado suavemente por el soplo de los astros,
mis oídos escuchan al único amor que no muere.

Vicente Aleixandre

El espíritu busca, pero el corazón es el que encuentra.

Aurore Dupín

¿Hay vida inteligente en la Tierra? Sí, pero estoy solo de visita.

Nadie está libre de decir estupideces, lo malo es decirlas con énfasis.

Michel De Montaigne

Todos hemos experimentado ese tiempo enfermo y vago, tedioso y horrible, que habita en la soledad no querida.

Elena Ochoa

Saber es relativamente fácil. Querer y obrar de acuerdo a lo que uno quisiera, es siempre más duro.

Aldous Huxley

Necesito autoridad, aunque no crea en ella.

Ernst Jünger

El periodismo es grande. Cada periodista ¿no es un regulador del mundo, si lo persuade?

Thomas Carlyle

Planear: preocuparse por encontrar el mejor método para lograr un resultado accidental.

Ambrose Bierce

Despréndete de todas las impresiones de los sentidos y de la imaginación, y no te fíes sino de la razón.

René Descartes

Ahí donde Dios tiene un templo, el demonio levanta una capilla.

Robert Burton