Colección de paco
Todo lo que se piensa es afecto o aversión.
Robert MusilDonde todos piensan igual nadie piensa mucho.
Walter LippmannLa excelencia de un gobierno no se juzga por su orden.
Lao TseSi eliges entre el menor de dos males, al final del dÃa, sigues teniendo mal.
Ralph NaderEs cosa admirable que todos los grandes hombres tengan siempre alguna ventolera, algún granito de locura mezclado con su ciencia.
MolièreEl medio de no cambiar es no pensar.
Joseph Ernest RenanEl amor sea sin fingimiento, aborreciendo lo malo y adhiriéndoos a lo bueno: 10 amándoos los unos a los otros con amor fraternal; en cuanto a honra, prefiriéndoos los unos a los otros.
Romanos 12:9
Sobre todo, tened entre vosotros un ferviente amor, porque el amor cubre una multitud de pecados.
1 Pedro 4:8
Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos.
Juan 15,13
Que Dios te responda cuando estés en angustia, Que El te protega y te envÃe ayuda. Que te conceda siempre su apoyo.
Salmo 20:1-2
Casi siempre que un matrimonio se lleva bien, es porque uno de los esposos manda y el otro obedece.
Gregorio MarañonEl valiente tiene miedo del contrario; el cobarde, de su propio temor.
Francisco De QuevedoLa gratitud, como ciertas flores, no se da en la altura y mejor reverdece en la tierra buena de los humildes.
José MartÃCuando los ojos se encuentran, nace el amor.
Proverbio hindúLa juventud, aun cuando nadie la combata, halla en sà misma su propio enemigo.
William ShakespeareNada ocurre porque si. Todo en la vida es una sucesión de hechos que, bajo la lupa del análisis, responden perfectamente a causa y efecto.
Richard FeynmanLa vida carece de valor si no nos produce satisfacciones. Entre éstas, la más valiosa es la sociedad racional, que ilustra la mente, suaviza el temperamento, alegra el ánimo y promueve la salud.
Thomas JeffersonLa amistad es un acuerdo perfecto de los sentimientos de cosas humanas y divinas, unidas a la bondad y a una mutua ternura.
CicerónNo es tan culpable el que desconoce un deber como el que lo acepta y lo pisa.
Concepción Arenal