La envidia es causada por ver a otro gozar de lo que deseamos; los celos, por ver a otro poseer lo que quisiéramos poseer nosotros.
Callando es como se aprende a oír; oyendo es como se aprende a hablar; y luego, hablando se aprende a callar.
Para casarte, cuando joven es temprano y cuando viejo es tarde.
En la vida es necesario proveerse de razón o de un ronzal.
Cuando somos jóvenes no ha llegado el tiempo adecuado de casarnos todavía, y cuando somos viejos ha pasado ya.
Preguntaron a Tales qué era más difícil al hombre, y contestó: «Conocerse a sí mismo».