Si alguno de los que pasen por la calle se detuviere, fijándose en la fachada de mi casa, haz fuego sobre él; si lo yerras, haz otro tiro, y si todavía lo yerras, ten por seguro que mi pistola no h...
Si el Papa viniera al Paraguay, puede ser que le nombrara mi capellán, pero bien se está él en Roma y yo en La Asunción.