Comprenderéis sin esfuerzo que es absurdo mantener, por medio de delatores y verdugos, la religión de un Dios al que los verdugos hicieron perecer. Es casi tan contradictorio como acaparar los tesor...
Al venir al mundo uno llora y los demás se alegran, es necesario morir riendo y que los demás lloren.
El sentido común no es nada común.
Es imposible, en nuestro desdichado globo, que los hombres viviendo en sociedad no estén divididos en dos clases, la una de opresores y la otra de oprimidos; y estas dos se subdividen en mil y esas m...
Ingenio, superstición, ateísmo, mascaradas, versos, traiciones, devociones, venenos, asesinatos, unos cuantos grandes hombres, un número infinito de canallas hábiles y sin embargo desdichados: he ...
Las pasiones son al gusto lo que el hambre canina al apetito.
Creo que el ateísmo es tan pernicioso como la superstición.
La felicidad nos espera en algún sitio a condición de que no vayamos a buscarla.
Hasta el día de hoy no he conocido a nadie que no haya gobernado algún Estado. No hablo desde luego de los señores ministros, que gobiernan efectivamente, los unos dos o tres años, los otros seis ...
Cuando se trata de dinero todos son de la misma religión.
No ser bueno más que para sí es no ser bueno para nada.
Un capuchino decía: "¡Qué sabio ha sido Dios poniendo la muerte después de la vida! Porque si la hubiera puesto antes, no hubiéramos tenido tiempo para hacer penitencias".
Una de las supersticiones del ser humano es creer que la virginidad es una virtud.
Algunos están destinados a razonar erróneamente, otros a no razonar en absoluto, y otros a perseguir a los que razonan.
La más feliz de todas las vidas es una soledad atareada.
Cuando la naturaleza formo nuestra especie, nos dio unos cuantos instintos, el amor propio para nuestra conservacion, la benevolencia para la conservacion de los otros, el amor que es común con todas...
En cierta ocasión hubo que escoger rey entre los árboles. El olivo no quiso abandonar el cuidado de su aceite, ni la higuera el de sus higos, ni la viña el de su vino, ni los otros árboles el de s...
Todas las glorias de este mundano valen lo que un buen amigo.
La inquisición, como es sabido, es una invención admirable y sumamente cristiana para hacer al papa y a los monjes más poderosos y para convertir en hipócrita a todo un reino.
La providencia nos ha dado el sueño y la esperanza como compensación a los cuidados de la vida.