Acciones de su gobierno de voltaire
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Nunca ha habido gobierno perfecto porque los hombres tienen pasiones; si no tuviesen pasiones, no necesitarían gobierno.
Hasta el día de hoy no he conocido a nadie que no haya gobernado algún Estado. No hablo desde luego de los señores ministros, que gobiernan efectivamente, los unos dos o tres años, los otros seis mese...
Es peligroso tener razón cuando el gobierno está equivocado.
Véase la preocupación de uno de esos salteadores políticos en obtener a ruegos el asentimiento de la mayoría para, en cualquier momento, poder alienar la responsabilidad. Pues ésta una de las principa...
La virtud y el vicio, el bien y el mal morales, son pues en todos los países lo que es provechoso o dañino para la sociedad; y en todos los lugares y en todas las épocas al que más se sacrifique a lo ...
La forma ideal de gobierno es la democracia atemperada con el asesinato.
Realiza cada una de tus acciones como si fuera la última de tu vida.
El orgullo de los mediocres consiste en hablar siempre de sí mismos; el orgullo de los grandes hombres es de no hablar nunca de ellos.
Una palabra mal colocada estropea el más bello pensamiento.
Yo no estoy de acuerdo con lo que usted dice, pero me pelearía para que usted pudiera decirlo.
Un soldado feliz no adquiere ningún derecho para mandar a su patria. No es el árbitro de las leyes ni del gobierno. Es defensor de su libertad.
Cuanto mas dolorosas son las consecuencias de la ira que las acciones que la han originado.
Hay dos tipos de patriotas: el que ama a su país y el que ama al gobierno de su país. Lógicamente los gobiernos consideran más patriotas a estos últimos.
El hombre bajo todo gobierno será el mismo, con las mismas pasiones y debilidades.
Si un gobernante rectifica su propia conducta, el gobierno es asunto fácil, y si no rectifica su propia conducta, ¿cómo puede rectificar a los demás?.
Las mujeres son la causa de todas las acciones de los hombres. Hablo porque hay mujeres escuchándome..
Es una verdad indiscutible que el conjunto del pueblo de cada país desea sinceramente su prosperidad; pero es igualmente irrefutable que no posee el descernimiento y la estabilidad necesarios para un ...
Un gobierno eficaz, transparente, responsable y confiable, que actúe bajo el predominio de la ley, es la base de un desarrollo sostenible, no el resultado de éste.
Un buen gobierno es como una buena digestión; mientras funciona, casi no la percibimos.
Bajo un gobierno que encarcele a alguien injustamente, el sitio adecuado para una persona justa es también la cárcel.
Es absurdo que un pueblo cifre sus esperanzas de redención y ventura en formas de gobierno que desconoce.
En materia de gobierno todo cambio es sospechoso, aunque sea para mejorar.
El gobierno tuvo su origen en el propósito de encontrar una forma de asociación que defienda y proteja la persona y la propiedad de cada cual con la fuerza común de todos.
Ningún gobierno puede sostenerse sin el principio del temor así como del deber. Los hombres buenos obedecerán a este último, pero los malos solamente al primero.
Cada pueblo tiene el gobierno que se merece.
Detesto más las malas máximas que las malas acciones.
Nunca olvidéis, discípulos, que un gobierno opresor es más cruel que un tigre.
Conozco a alguien que tiene más espíritu que Napoleón, que Voltaire, que todos los ministros presentes y futuros: la opinión pública.
Espantoso juego del amor, en el cual es preciso que uno de ambos jugadores pierda el gobierno de sí mismo.
Decimos una tontería y a fuerza de repetirla acabamos creyéndola.
Para encadenarlo (al pueblo) es preciso aparentar que se llevan las mismas cadenas que él.
La superstición es a la religión lo que la astrología es a la astronomía, la hija loca de una madre cuerda.
Hay que saber que no existe país sobre la tierra donde el amor no haya convertido a los amantes en poetas.
El que tiene miedo de la pobreza no es digno de ser rico.
El placer da lo que la sabiduría promete.
¡Cuán querida es de todos los corazones buenos su tierra natal!
Quien no tiene toda la inteligencia de su edad, tiene toda su desgracia.
Claro que el café es un veneno lento; hace cuarenta años que lo bebo.
No comparto lo que dices, pero defenderé hasta la muerte tu derecho a decirlo.
Cada hombre, en el fondo de su corazón, tiene derecho a creerse enteramente igual a los demás hombres; de ello no se desprende que el cocinero de un cardenal deba ordenar a su amo que le haga la cena;...
 es preciso aparentar que se llevan las mismas cadenas que él.){kind=link}
