Es peligroso tener razón cuando el gobierno está equivocado.
Voltaire
El hombre que no sabe correr, saltar, nadar... es como un automóvil en el que solo se emplea la primera velocidad.
En ciertos oasis el desierto es solo un espejismo.
¡Arriesga! ¡arriesga lo que sea!, despreocúpate por las opiniones de los demás, por esas voces. Haz lo más difícil del mundo para ti.
Nada diré que sea mentira; iré sobre la claridad, como una espiga al viento, hacia la eternidad.