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Cartas de amor que hagan llorar ( 25 )

Cartas de amor que hagan llorar. Encuentra docenas de cartas de amor que hagan llorar con fotos para copiar y compartir.



Galope Súbito

A veces cruza mi pecho dormido
una alada magnolia gimiendo,
con su aroma lascivo, una campana
tocando a fuego, a besos,
una soga llanera
que enlaza una cintura,
una roja invasi...

Eduardo Carranza


Erguida Flor

De ti se nutren todas mis raíces:
me nutro de tu voz, de tu mirada
y de ti, porque vivo enamorada
de lo que piensas y de lo que dices.

La carne triste y los cabellos grises
iremos al f...

Dora Castellanos



¿mi Amor?

¿Mi amor?...¿Recuerdas, dime,
aquellos juncos tiernos
lánguidos y amarillos
que hay en el cauce seco?...

¿Recuerdas la amapola
que calcinó el verano,
la amapola marchita,
negro cresp...

Antonio Machado


Mudanza

Ayer, el cielo azul, la mar en calma
y el sol ignipotente y cremesino,
y muchas ilusiones en mi alma
y flores por doquier en mi camino.

Mi vida toda júbilos y encantos,
mi pecho rebosando d...

Salvador Díaz Mirón


¡otra Vez Dios!

¡Otra vez Dios!... De nuevo la mañana.
De nuevo su pureza conseguida.
De nuevo en mi tarea, la encendida
propuesta de una estrofa soberana.

Florece el corazón. Cunde la sana
canc...

Enrique Azcoaga


Cuando, Dormida Tú...

Cuando, dormida tú, me echo en tu alma
y escucho, con mi oído
en tu pecho desnudo,
tu corazón tranquilo, me parece
que, en su latir hondo, sorprendo
el secreto del centro
de...

Juan Ramón Jiménez



Godiva En Blue Jeans

Cuando sobrepasemos la raya que separa
la tarde de la noche, pondremos un caballo
a la puerta del sueño y, tal Lady Godiva,
puesto que así lo quieres, pasearé mi cuerpo
-los p...

María Victoria Atencia


Souvenir

Este amor que ha llegado entre la niebla,
igual que en otro invierno, sigiloso,
todo un ayer con su presencia puebla.
No turbarán el don de su reposo
crueles palabras ni celosos daños.
Sol...

Alberto Angel Montoya


Amor de Hombre

Mi estricta voluntad, mi punta seca
que está domando en ella
oceánicas pasiones y rumores antiguos. El cauterio que aplico
a esa llaga amorosa que, sin forma, palpita.

Si hie...

Gabriel Celaya



Las Lágrimas

Las lágrimas son el vino de los ángeles.
San Bernardo

Un día el hombre vio llorar al ángel.
Algo había pasado en los espacios,
algo muy tierno o algo muy terrible,
y el hombre con...

Juan Gil-Albert


No Soy La doncella Sagrada

Tu amor me será hoy
dos veces grato.

No soy, lo has visto,
la doncella sagrada
y ocupo por lo tanto
de tus buenos oficios
para soltar los cascos de la especie
por mi cuer...

Ana Istarú


Autorretrato

Todo lo que llevo dentro
está ahí fuera.
Se ha hecho -fiel a sí mismo-
mi evidencia.
Mis pensamientos son montes,
mares, selvas,
bloques de sal cegadora,
flores lentas.
El sol realiza...

Gerardo Diego


Ciencia de Amor

No sé. Solo me llega, en el venero
de tus ojos, la lóbrega noticia
de dios; solo en tus labios, la caricia
de un mundo en mies, de un celestial granero.

¿Eres limpio crista...

Dámaso Alonso



Tentación

Calló por fin el mar, y así fue el caso:
En un largo suspiro violeta,
se extenuaba de amor la tarde quieta
con la ducal decrepitud del raso.

Dios callaba también; una secreta
inquietud...

Leopoldo Lugones


Noria de Noches

Otros sufren de hambre o padecen prisión
o viven con vergüenza o con humillación
o rumian una culpa o aguardan un perdón

Yo llevo este secreto que va en mi corazón

Otros están...

Félix Grande


El Juego En Que Andamos

Si me dieran a elegir, yo elegiría
esta salud de saber que estamos muy enfermos,
esta dicha de andar tan infelices.
Si me dieran a elegir, yo elegiría
esta inocencia de no s...

Juan Gelman


Fuensanta, Dulce Amiga...

Fuensanta, dulce amiga,
Blanca y leve mujer,
Dueña ideal de mi primer suspiro
Y mis copiosas lágrimas de ayer;
Enlutada que un día de entusiasmo
Soñé condecorar,
Prendi...

Ramón López Velarde


Diálogo Con Un Retrato

Surges amarga, pensativa,
profunda tal un mar amurallado;
reposas como imagen hecha hielo
en el cristal que te aprisiona
y te adivino en duelo,
sostenida bajo un mortal...

Alí Chumacero


Carta de Roma

Te escribo, amor, desde la primavera.

Crucé la mar para poder decirte
que, bajo el cielo de la tarde, Roma
tiene otro cielo de golondrinas,
y entre los dos un ángel de oro pasa
danza...

Meira Delmar


Los Caminos de La Tarde...

Los caminos de la tarde
se hacen uno, con la noche.
Por él he de ir a ti.
amor que tanto te escondes.

Por él he de ir a ti,
como la luz de los montes,
como la brisa del ...

Juan Ramón Jiménez


La Muchacha Que No Ha Visto El Mar

Rosa, la pobre Rosa, no ha visto nunca el mar.

Echa a volar su sueño en el campo vecino,
a la alondra demanda el secreto del trino
cuando lanza a los vientos su c...

Enrique González Martínez


de Agua Dulce

Nunca hubiera adivinado que un amor
fuera la corriente más subterránea
sin escaparse
que va del tibio heno a un pozo
y de ahí empedrada a los huertos
sin dividirse
pero yo sí ante t...

Pureza Canelo


Dos Mujeres

Agua amarga de un mar cuya ribera
era el párpado azul. Qué cielo ido
de ese mar a otro mar, entristecido
de lágrimas también y azul ojera.

Yo las amé a las dos. La una era
triste y ...

Alberto Angel Montoya


Amor

El amor es fragante como un ramo de rosas.
Amando, se poseen todas las primaveras.
Eros trae en su aljaba las flores olorosas
de todas las umbrías y todas las praderas.

Cuando viene a mi lecho...

Juana de Ibarbourou


Toda Tú

Toda tú eres santuario,
toda blanca;
se ha llenado tu cuerpo de designios.
Tienes la santidad de la esperanza
y la paz
generosa
de los lirios.
Toda tú eres milagro,
das tu lecho
de altas a...

Manuel José Arce


Sobre Unos Lirios

(APUNTES)

I
Mancebos como príncipes,
os habéis alejado del jardín
y crecéis en mi alma,
en algún oculto declive.

Morados y blancos, malvas y amarillos
son los colores de vues...

Juan Gil-Albert



Hora

Me acordaré de ti
todas las noches a las once!...

En la plaza sin luna de tu ausencia
pronunciaré tu nombre
con el mismo temblor del primer día
todas las noches, a las once!...

Y aunque est...

Rafael de León


Retornos Del Amor En Una Azotea

Poblado estoy de muchas azoteas.
Sobre la mar se tienden las más blancas,
dispuestas a zarpar al sol, llevando
como velas las sábanas tendidas.
Otras dan a los campo...

Rafael Alberti


Amor, Como Los Ríos

Oculta fuerza de agua soterrada,
nos sorprendió el amor tan de repente,
que al mirarse a los ojos hondamente
se desbordó el amor en la mirada.

Y brotó aquella fuente enamorad...

Dora Castellanos


Lunas de Ayer

La luna, esta noche, la que nunca ha vuelto
vendrá para nosotros.

Porque hemos mentido, como en las lunas de ayer.
No habrá segunda parte esta vez.

Nuestro amor ha de ser como nunca...

Harold Alvarado Tenorio


Si Has Perdido...

Si has perdido tu nombre,
recobraremos la puntada de las calles
más solas
para llamarte sin nombrarte.

Si has perdido tu casa,
despistaremos a los guardianes de la
cárcel
hasta d...

Roberto Juarroz


Estío

Una dura raigambre de alto helecho
he elegido por tumba prematura
en esta soledad de arena oscura
donde gime la sangre de mi pecho.

Lejos está el amor. Aquí cosecho
un bronco sol para mi se...

José Luis Cano


A Florinda En Invierno

Al hombre mozo que te habló de amores
dijiste ayer, Florinda, que volviera,
porque en las manos te sobraban flores
para reírte de la Primavera.

Llegó el Otoño: cama y cobe...

Andrés Eloy Blanco


Que Yo Sea

Las dudas surgen -trenzadas- de las dudas;
la tenaz certidumbre, del amor.
No dudes más, confía.
Come de mi mano, paloma;
de mi cuerpo, antropófaga.
Aliméntate de mí.
Que yo sea
hosti...

Enrique Jaramillo Levi


Soneto de La Nieve Todavía

Mira cómo se quema el Guadarrama
en sus torres azules. Esa loma
tiene un poco de nieve, una paloma
que ha librado sus alas de la llama.

Qué desierta de pájaros la rama...

José García Nieto


Mientras Muere La Tarde

Noble señora de provincia: unidos
En el viejo balcón que ve al poniente,
Hablamos tristemente, largamente,
De dichas muertas y de tiempos idos.

De los rústicos tiestos flo...

Ramón López Velarde


Madre Naturaleza

Madre, madre, cansado y soñoliento
quiero pronto volver a tu regazo;
besar tu seno, respirar tu aliento
y sentir la indolencia de tu abrazo.

Tú no cambias, ni mudas, ni envejeces;...

Manuel Gutiérrez Nájera


Ojos Verdes

Ojos verdes de Marta de Nevares.
Ojos, ¿negros tal vez? de Dorotea.
Ojos azules, clara luz febea
de Camila Lucinda. ¡Qué avatares

de amor sin contención! Gozos, pesares,
gozos... Est...

Vicente Gaos


Profundo Amor

Profundo amor
nacido a ras del arco
arco tendido contra lo imposible
tu voz de cueva se extendió en mi cuenco
cabalgaste flechas hasta el mismo centro

El tiempo nos lanzó de lado a l...

Gioconda Belli


Cancioncilla de La Esposa

Mariuca, esposica, madre:
Dios te salve
en este día y siempre.
dios te guarde,
y mi corazón de rabia y trigo
y sangre,
esta luz amorosa que en el filo
de las palabras arde...

Ramón de Garcíasol

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