Frases cortas de sabina
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Que ser valiente no salga tan caro, que ser cobarde no valga la pena.
Y si protesta el corazon en la farmacia puedes preguntar, tienes pastillas para no soñar?
No hay nostalgia peor que añorar lo que nunca jamás existió.
Lo bueno de los años es que curan heridas, lo malo de los besos es que crean adicción.
Está bien tener sombrero por si se presenta una buena ocasión para quitárselo.
Estos labios que saben a despedida, a vinagre en las heridas, a pañuelo de estación
A menudo los labios más urgentes no tienen prisa dos besos después.
De ti depende y de mí que entre los dos siga siendo ayer noche, hoy por la mañana.
Era tan pobre que no tenía más que dinero.
Solo me pongo triste cuando alguno... en el momento más inoportuno... me pregunta por ti.
Me falta un corazón me sobran cinco estrellas de hoteles de ocasión donde dejar mis huellas
Los besos que me perdí por no saber decir te necesito
Los hombres engañan más que las mujeres; las mujeres, mejor.
Pelearé hasta el último segundo y mi epitafio será: no estoy de acuerdo.
Amor se llama el juego en el que un par de ciegos juegan a hacerse daño.
Nunca tuve más religión que un cuerpo de mujer.
Qué pequeña es la luz de los faros de quien sueña con la libertad.
El amor es una epidemia que se acaba con el tiempo.
Yo siempre he sido un marxista de la tendencia pro grouchiana
Yo no quiero París con aguacero ni Fuentealbilla sin ti.
Sé que no lo soñé, protestaba mientras me esposaban los pinches federales.
Plácido Domingo me hace vomitar cuando canta tangos. Y a veces también cuando no los canta.
No pido perdón,
¿para qué? si me va a perdonar
porque ya no le importa?
Qué quieres saber de tu prima, la próxima vez le salto encima
cuando al punto final de los finales, no le siguen dos puntos suspensivos.
Virgen de la Amargura, devuélveme la vida, sin ti todo es usura, y noches perdidas
Cada vez escribo más historias de amor, será porque cada vez ligo menos.
Estoy escribiendo más que nunca, supongo que es por que follo menos que nunca.
Dónde crees que vas, qué te parece que soy, no mires atrás, que ya no estoy.
Pero esta noche estrena libertad un preso
...y el lunes al café del desayuno - vuelve la guerra fría - y al cielo de tu boca el purgatorio
Pruébame, dijo el veneno.
Por decir lo que pienso, sin pensar lo que digo mas de un beso me dieron y mas de un bofetón
Y yo que había jurado morir sin descendencia, como murió mi padre.
Gracias a ti he sabido que la verdad
Por más que llueva, y valga la redundancia, llueve sobre mojado.
Le di mis noches y mi pan, mi angustia, mi risa, a cambio de sus besos y su prisa.
¿Quién hará mi trabajo debajo de tu falda?
Me podrán robar tus días; tus noches no.
Bendita sea la boca que da besos y no traga monedas.
