Friedrich Nietzsche engaño. Encuentra docenas de Friedrich Nietzsche engaño con fotos para copiar y compartir.
Cuanto más se eleva un hombre, más pequeño les parece a los que no saben volar.
Dotado de facciones más divinas resurge, y seduce precisamente por su sufrimiento; y os agradecerá por haberlo derribado.
Ebrio placer es, para quien sufre, apartar la vista de su sufrimiento y perderse a sí mismo.
Yo solo creería en un Dios que supiera bailar.
Miradas todas del amor, instantes divinos, moristeis prematuramente.
Le gusta al frió monstruo entrar en calor al sol de las conciencias limpias.
¡que poco se requiere para ser feliz!. . . El sonido de una gaita.
De la generosidad de las almas generosas debe formar parte la gracia.
Eternidades tiernas.
La cultura y el Estado -no nos engañemos sobre esto- son rivales: el "Estado de cultura" no pasa de ser una idea moderna. Lo uno vive de lo otro, lo uno prospera a costa de lo otro. Todas las épocas...
Es preciso aprender a amar y a ser bondadosos, y eso, desde la juventud; si ni la educaci6n ni el azar nos proporcionan ocasión de ejercitar tales sentimientos, nuestra alma se volverá seca e inclus...
Y en esa fugaz felicidad ebria que solo el que más sufre experimenta.
Es bien sabido que la ciencia y el nacionalismo son cosas que se contradicen, aunque los monederos falsos de la política nieguen ocasionalmente ese saber: pero también llegará ¡por fin! el día en...
Oh, esos pobres pícaros que están en las grandes ciudades de la política mundial, hombres jóvenes, dotados, torturados por la ambición, que consideran su deber decir su palabra acerca de todos lo...
¿Me habrá quitado algo un dios mientras yo estaba dormido?.
La crueldad es a menudo el signo de una insatisfacción interior que anhela un narcótico; y también lo es una cierta desconsideración cruel del pensamiento.
Con múltiple espejo captaba yo aun su mirada cuando su boca estaba cerrada, para que me hablaran sus ojos. Y sus ojos me hablaban, en efecto.
No me entienden; yo no soy la boca que sepa llegar a esos oídos.
Pero incluso cuando llora hace reír.
En el dolor hay tanta sabiduría como en el placer; ambas son las dos grandes fuerzas conservadoras de la especie.
Demasiado tiempo me debatí en la añoranza, con la mirada clavada en la lejanía, demasiado tiempo permanecí en la soledad, así que ya no se callar.
Cuando una vida larga y una actividad prolongada, además de discursos y escritos, dan testimonio público de un personaje, el trato con él suele decepcionar, por dos razones: de un lado, porque se a...
Amo al que hace de su virtud su afán y fatal destino; pues por su virtud quiere seguir con vida y no quiere vivir más.
Se parecen ellos a los exaltados; pero lo que los exalta no es su corazón, sino la venganza. Y cuando se vuelven finos y fríos no es su espíritu, sino la envidia.
Un peligroso cruzar, un peligroso mirar hacia atrás, un peligroso estremecerse y detener el paso.
La vida es un instinto de desarrollo, de supervivencia, de acumulación de fuerzas, de poder.
Ha llegado la hora de buscar a los perdidos.
Locura le llamó a esto; la excepción se convertiría para él en la regla.
Solamente aquel que construye el futuro tiene derecho a juzgar el pasado.
El que busca fácilmente se pierde. Todo aislamiento es culpa.
Lenta es la experiencia de todos los pozos profundos; tardan mucho en saber lo que ha caído a su fondo.
Todo pensador profundo tiene más miedo a ser entendido que a ser malentendido.
Tal es el destino que quiere mi voluntad.
¿ Donde esta la belleza? Allí donde uno tiene que querer con toda la fuerza de voluntad; allí donde uno quiere amar y perecer, para que tal imagen deje de ser nada más que imagen. Amar y perecer; ...
En los individuos es rara la locura - pero es la regla en los grupos, partidos, pueblos, épocas y por ello los historiadores no han hablado hasta ahora de locura. Pero alguna vez la historia la escri...
La igualdad hace disminuir la felicidad del individuo, pero abre la vía para la ausencia de dolor de todos. Al final de la meta estaría ciertamente la ausencia de dolor, pero también la ausencia de...
Vuestra virtud es vuestro propio ser, y no nada ajeno a vosotros; es piel y disfraz.
Y solo si se aparta de sí mismo saltará su propia sombra.
El último cristiano murió en la cruz.
Y muchas veces uno solo quiere saltar mediante el amor por encima de la envidia. Y muchas veces uno ataca, haciéndose un enemigo, para disimular que es atacable.