Mendigos. Encuentra docenas de mendigos con fotos para copiar y compartir.
El hombre que ha de mendigar amor es el más miserable de todos los mendigos.
¡La misericordia se otorga, no se gana! Se concede a los mendigos: ¡no la compra la virtud!
Si solo se dieran limosnas por piedad, todos los mendigos hubieran ya muerto de hambre.
...el que no tiene ni bobos, ni bellacos, ni mendigos en su familia, fue engendrado por un rayo de luz.
Si eres feliz, escóndete. No se puede andar cargado de joyas por un barrio de mendigos. No se puede pasear una felicidad como la tuya por un mundo de desgraciados.
El Evangelio habla de los publicanos, o sea, cobradores de impuestos al servicio del poder extranjero. Pues el país de Jesús estaba dominado por el Imperio Romano, y los publicanos eran judíos que ...
"Solo aquellos mendigos de la idolatría, se sumergen en el más absoluto ejemplo de la involución e ignoracia"
Si los deseos fueran caballos, los mendigos sabrían montar.
Si los mendigos no odie el resto de nosotros, que son aún más extrema de lo que había imaginado.
El carácter americano parece siempre como si acababa de tener un lugar mal corte de pelo, que le da, a nuestros ojos, en todo caso, una mayor humanidad que el europeo, que incluso entre sus mendigos ...
El viejo sistema económico en Inglaterra no podía hacer frente al exceso de población. El excedente de gente era, en su mayoría, muy mala gente -mendigos y ladrones, ladrones y prostitutas.
Fue entre los agricultores y excavadoras patata y ancianos en asilos y mendigos en mi propia puerta que encontré lo que estaba más allá de esto y aún más allá de eso drawingroom poeta de mi infa...
La pregunta que me preguntó Georges se ha convertido en uno general - Tú, que pensaban que eran superfluos, que pensaba que no había lugar para que en la sociedad, no solo no superflua, que son nec...
Las preguntas son como los golpes de mendigos, no deben tenerse en cuenta
Yo había crecido en el convencimiento de que aquella lenta procesión de la posguerra, un mundo de quietud, miseria y rencores velados, era tan natural como el agua del grifo, y que aquella tristeza ...
Si los deseos fueran caballos, los mendigos serían jinetes.