Miguel Ángel retana zamora. Encuentra docenas de miguel Ángel retana zamora con fotos para copiar y compartir.
¡Belleza, sí belleza! Pero la belleza no es eso, no es la del arte por el arte, no es la de los esteticistas. Belleza cuya contemplación no nos hace mejores no es tal belleza.
Las armas tienen por objeto y fin la paz, que es el mayor bien que los hombres pueden desear en esta vida.
¿qué locura o que desatino me lleva a contar las ajenas faltas, teniendo tanto que decir de las mías?.
Siendo contra los clamores de la naturaleza vender a los hombres, quedan abolidas las leyes de la esclavitud.
Ser joven significa ser dueños de nuestra vida, de nuestro presente y estar dispuestos a desafiar nuestro porvenir; aceptar las circunstancias sin envidiar ni protestar; admitir la maravilla que somo...
Sembrado para comer es sagrado sustento del hombre que fue hecho de maíz. Sembrado por negocio es hambre del hombre que fue hecho de maíz.
Las armas requieren espíritu como las letras.
Refinada soberbia es abtenerse de obrar por no exponernos a la crítica.
Es detestable esa avaricia espiritual que tienen los que sabiendo algo, no procuran la transmisión de esos conocimientos.
Sea moderado tu sueño; que el que no madruga con el sol, no goza del día.
Llenáronse de regocijo los pechos porque se llenaron las tazas de generosos vinos que, cuando se trasiegan por la mar, de un cabo a otro, no hay néctar que se les iguale.
La libertad, Sancho, es uno de los más preciosos dones que a los hombres dieron los cielos; con ella no pueden igualarse los tesoros que encierran la tierra y el mar: por la libertad, así como por l...
El poeta es una conducta moral.
Procuremos más ser padres de nuestro porvenir que hijos de nuestro pasado.
El que tiene fe en sí mismo no necesita que los demás crean en él.
No puede ser bueno aquél que nunca ha amado.
Tanto más fatiga el bien deseado cuanto más cerca está la esperanza de poseerlo.
Jamás desesperes, aun estando en las más sombrías aflicciones, pues de las nubes negras cae agua limpia y fecundante.
No hay camino que no se acabe si no se le opone la pereza.
Tu desconfianza me inquieta y tu silencio me ofende.
En los principios amorosos los desengaños prestos suelen ser remedios calificados.
Que Sosiego, Que Alivio...
Qué sosiego, qué alivio, qué dulzura en la noche frente al aire,
en la alta hora brillante, cuando un fluído intenso
de calma luz se diluye en el tiempo y en la frescur...
La felicidad no es cosa fácilmente digerible; es, más bien, muy indigesta.
Un padre para cien hijos, antes que cien hijos para un padre.
Para un pueblo hambriento e inactivo, la única forma en la que Dios puede aparecer es en la de comida y trabajo.
El que no sabe gozar de la ventura cuando le viene, no debe quejarse si se pasa.
¡Oh envidia, raíz de infinitos males y carcoma de las virtudes!.
Dama
Esta dama sin cara ni camisa,
alta de cuello, suave de cintura,
tiene todo el temblor de la hermosura
que el tiempo oculta y el amor desliza.
Esta dama que viene de la brisa
y el rango lleva de ...
Adonde interviene el favor y las dádivas, se allanan los riscos y se deshacen las dificultades.
Esta que llaman por ahí Fortuna es una mujer borracha y antojadiza, y sobre todo, ciega, y así no ve lo que hace, ni sabe a quien derriba.
Contra los valores afectivos no valen razones, porque las razones no son nada más que razones, es decir, ni siquiera verdad.
Mientras se gana algo no se pierde nada.
Se viaja no para buscar el destino sino para huir de donde se parte.
No andes, Sancho, desceñido y flojo, que el vestido descompuesto da indicios de ánimo desmalazado.
No me he planteado grabar en inglés porque quiero traspasar las fronteras con nuestro idioma y defenderlo, porque además es el más bonito.
Al poseedor de las riquezas no le hace dichoso el tenerlas, sino el gastarlas, y no el gastarlas como quiera, sino el saberlas gastar.
A veces, el silencio es la peor mentira.
A menos pensamiento, pensamiento más tiránico y absorbente.
Alguno se estima atrevido, cuando con otros se compara. Algunos creo que hubo tan discretos que no acertaron a compararse sino a sí mismos.
Las sentencias cortas se derivan de una gran experiencia.