Nuestras buenas y nuestras malas acciones nos siguen casi como una sombra.
Buda
Amor se llama el juego en el que un par de ciegos juegan a hacerse daño.
América no es tanto una tradición que continuar como un futuro que realizar.
Mientras religión y ética pueden dirigirse al individuo aislado y podrían existir en un solo hombre sobre el mundo, la política necesita para su posibilidad la existencia de la sociedad.
Hay que avergonzarse de cometer una falta, no de repararla.