¡Oh odio, alégrame siquiera tú Hazme ver a la muerte royéndolos a todos
Fernando Pessoa
Pero aún rechazando la autoridad absoluta, universal e infalible de los hombres de ciencia, nos inclinamos voluntariamente ante la autoridad respetable, pero relativa, muy pasajera, muy restringida, ...
Si sabes que esos dolores -físicos o morales- son purificación y merecimiento, bendícelos.
Me gustaría que se me apareciera el fantasma de Marilyn Monroe por puro morbo: quisiera saber qué le pasó de verdad.
En caso de duda, a la mierda.