La educación es el desarrollo en el hombre de toda la perfección de que su naturaleza es capaz.
Immanuel Kant
Todos estamos aparentemente atrapados en un mundo mental en el que las visiones se diluyen con la ensoñación y el deseo.
Pregúntate si eres feliz y dejarás de serlo.
El honor que se vende, aunque se dé muy poco por él, siempre se paga más de lo que realmente vale.
Tengo tres perros peligrosos: la ingratitud, la soberbia y la envidia. Cuando muerden dejan una herida profunda.