El corazón no habla pero acierta.
Perdonar es no tener demasiado en cuenta
las limitaciones y defectos del otro,
no tomarlas demasiado en serio,
sino quitarles importancia, con buen humor, diciendo: ¡sé que tú no eres así!
La enseñanza se ha puesto muy complicada, y uno ya no sabía ni qué enseñar, ni cómo enseñar, ni a quién enseñar.
Solo hay mundo donde hay lenguaje.
Quien nunca haya cometido un error, nunca ha intentado algo nuevo.