Nunca, como al morir un ser querido, necesitamos creer que hay un cielo.
Jacinto Benavente
El hombre, nos lo han dicho muchas veces, es.un oscuro enigma; pero ¿en qué lo es más que el resto de la naturaleza?.
Engullimos de un sorbo la mentira que nos adula y bebemos gota a gota la verdad que nos amarga.
Las cualidades sublimes infunden respeto; las bellas, amor.
Para que tu tristeza muda no oyese mis palabras, te hablé bajito.