Colección de jose
El gallo que ya no canta, está mal de la garganta.
RefránNo son nube ni flor los que enamoran; eres tú, corazón, triste o dichoso, ya del dolor y del placer el árbitro, quien seca el mar y hace habitar el polo.
RosalÃa De Castro¡Y no olvidamos!. De súbito, nos viene antigua lumbre, nos enciende y dora, y nos puebla de imágenes queridas o de remordimiento nos agobia.
César BrañasEstoy aquà por estar, y la nieve sigue cayendo.
Kobayashi IssaDefiendo la revolución en nuestras cabezas
John LennonVivid, creedme, no esperéis a mañana. Coged hoy las rosas de la vida.
Pierre De RonsardConocer lo que es justo y no practicarlo es una cobardÃa.
Confucio¡La doctrina de la igualdad!... Pero si no existe veneno más venenoso que ése: pues esa doctrina parece ser predicada por la justicia misma, mientras que es el final de la justicia... "Igualdad para los iguales, desigualdad para los desiguales" - ése seria el verdadero discurso de la justicia: y, lo que de ahà se sigue, "no igualar jamás a los desiguales".
Friedrich NietzscheEl secreto de la genialidad es el de conservar el espÃritu del niño hasta la vejez, lo cual quiere decir nunca perder el entusiasmo.
Aldous HuxleyLa derrota tiene algo positivo, nunca es definitiva. En cambio la victoria tiene algo negativo, jamás es definitiva.
José SaramagoLa solución puede alcanzarse por medio de la adoración de animales, del sacrificio humano o las conquistas militares, por la complacencia en la lujuria, el renunciamiento ascético, el trabajo obsesivo, la creación artÃstica, el amor a Dios y el amor al Hombre.
Erich FrommUno cree que muere por la patria y muere por los industriales.
Anatole FranceFlorece tu cuerpo, y yo me muero. El alba.
Luis Cardoza Y AragónEl que posee un amigo verdadero puede decir que posee dos almas.
Arturo GrafLa luna pasa al oeste. La sombra de las flores se estira al este.
Yosa BusonEl cerebro es más grande que el cielo si los pones uno junto al otro el primero contiene al segundo y sin dificultad te incluye a tà también.
Emily DickinsonReto
Maduro fuego por azar cautivo
en el estrecho cauce de mis venas.
Brazo de afán helado entre cadenas,
rostro de ayer presente en sueño vivo.
Paloma del zarzal y del olivo
que a perseguir tu vuelo me condenas.
Fuente, sobre la sed de las arenas,
negándose a mi tallo sensitivo.
Como lleva la noche al sol distante
y el párpado cerrado los colores,
asà te llevo en pulso palpitante.
Viuda de tu presencia en lo visible,
están en mà tus dádivas mejores
y alzo en forma cabal sangre imposible.
El deseo hace hermoso lo feo.
RefránHemos remado bien dice la pulga, cuando el pescador ataca.
Proverbio Letón