Cuando el león envejece hasta las moscas le atacan.
El cazador busca la pieza, la pieza no busca al cazador.
La sal no dice de sí misma que es salada.
Cada hombre deja sus huellas.
Un perro no entra en una casa donde hay hambre.
El río se llena con arroyos pequeños.
La boca de un hombre mayor está sin dientes, pero nunca sin palabras de sabiduría.
Un hombre no vaga lejos de donde se está asando su maíz.
El cazador no se frota con grasa y se pone a dormir junto al fuego.
El matrimonio está como un cacahuete, hay que romper la cáscara para ver lo que hay dentro.
El cazador que persigue a un elefante no se detiene para tirar piedras a los pájaros.
Después de haber recorrido el mundo entero en busca de la felicidad, te das cuenta de que estaba en la puerta de tu casa.
Un amigo es como una fuente de agua durante un viaje largo.
Hay quien tiene cabeza pero no tiene gorra para ponerse, y hay quien tiene gorra pero no tiene cabeza.
Hay más sabiduría escuchando que hablando.
No hay donde ocultarse en la superficie de agua.
Nunca se olvidan las lecciones aprendidas en el dolor.
Una tormenta de arena pasa; las estrellas permanecen.
Una cabra no puede llevar la cola de otra cabra.
Recuerda, si hay tormenta habrá arco iris.