Estoy orgulloso de mis amigos. Tendré enemigos, pero los aparto rápido. Me encanta tomar un culín con cualquiera, a mí en Gijón me conocen hasta las ratas
El fútbol se parece a la adolescencia. Es muy carnal, muy del corazón
He tenido la fortuna de entrenar al equipo de mi vida, el Racing. Pero tuve la mala suerte de que pasó una paloma y se cagó precisamente en mi tejado.
Uno de los grandes inventos del siglo ha sido el Espidifén
No dudo en ser amigo de mi jugador
Entendería cualquier decisión. Llevo tanto tiempo en el fútbol que me han salido pelos en los huevos
No soy un 'amarrategui', pero tampoco gilipollas.
Estoy más quemado que la moto de un hippie.
Yo no soy muy purista, lo que sí quiero es que mi equipo sea ambicioso, que esté siempre dispuesto y se vea capaz de ganar a cualquiera. A partir de ahí, puede pasar de todo.
Ni antes cuando perdimos 6-1 y 7-1 con Barça y Madrid éramos la última mierda que cagó Pilatos ni ahora somos el Bayer Leverkusen; no, somos el Sporting.
Nuestro objetivo es, y seguirá siendo, conseguir los puntos necesarios para dejar a tres equipos por debajo al final de temporada
Me molesta perder, como a todos. Pero separo las cosas. No me como la cabeza por tonterías. La filosofía es clara: mañana empieza el día de nuevo
Lamento si hice algo mal, seré de este equipo toda mi vida. Seré socio del Sporting hasta que me muera
Para mí, éste es un juego colectivo y cuando se consigue eso, se consigue mucho