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Confundidos por el bramido de las aguas ( 2 )

Confundidos por el bramido de las aguas. Encuentra docenas de confundidos por el bramido de las aguas con fotos para copiar y compartir.



Contemplo Entre Las Aguas de Tu Cuerpo...

Contemplo entre las aguas de tu cuerpo
la celeste blancura del pantano
desnudo bajo el campo con relieves
y circundado por el verde fuego.

No muy lejos el m...

Juan Eduardo Cirlot


Fábula Del Aguador Y La Ciudad de Enfrente

Ella confunde la piel con algún río
y al corazón con la ciudad de enfrente
F. A. Dopico

Ella confunde la piel con un estanque
canta junto a mi oído su...

Odette Alonso



Amanecer

Imagínate tú...
Imagínatelo tú por un momento.
R. A.

La estrella aún flotaba en las aguas.
Río abajo, a la noche del mar, la llevó la corriente.
Y de pronto la mágica músic...

José Hierro


Anverso

No veo tu sonrisa entre mis labios
apurar la prolongada espera
en tu abandono de luciérnaga a la noche;
sólo tengo asida entre mis brazos
la inexpresable lucha
de penetrar en el bosque sin ...

Homero Aridjis


La Primera Mujer Que Recorrió Mi Cuerpo...

La primera mujer que recorrió mi cuerpo
tenía labios de maga: labios verdes y azules,
con sabor a fruto silvestre,
con señales indescifrables como la mi...

Francisco Hernández


de Agua Dulce

Nunca hubiera adivinado que un amor
fuera la corriente más subterránea
sin escaparse
que va del tibio heno a un pozo
y de ahí empedrada a los huertos
sin dividirse
pero yo sí ante t...

Pureza Canelo



A La Orilla Del Sueño

A la orilla del sueño algo de mí despierta
Brasas que miran la otra parte que
como siempre
duerme

Hay una barca que se abre ante el mar como una espera
Hay una vertical somb...

Efraín Bartolomé


Oceánidos Ii

Ay ballestas de plata
sobre los matorrales
de la espuma
que lanzáis como flechas
vuestro cuerpo en el salto.

Ay sabios adivinos
voladores
delicados
délficos
delfines.

Tórtolas de l...

Blanca Andreu


Nacimiento Del Potro

El potro negro del deseo
Ancho Impaciente Sudoroso
viene

Sus cascos firmes quiebran la hojarasca
La hierba tierna tiembla y se marchita
con la caricia humeante de sus belfos

Ro...

Efraín Bartolomé



Soneto de La Dulce Queja

Tengo miedo a perder la maravilla
de tus ojos de estatua, y el acento
que de noche me pone en la mejilla
la solitaria rosa de tu aliento.

Tengo pena de ser en esta orilla
tr...

Federico García Lorca


Al triste

Ahí está lo que fue: la terca espada
del sajón y su métrica de hierro,
los mares y las islas del destierro
del hijo de Laertes, la dorada
luna del persa y los sin fin jardines...

Jorge Luis Borges


Dicen que canto al hablar


Dicen que canto al hablar
pues hijo soy de un cantor,
desde mi tierra natal
como el mas fiel ruíseñor.

Aquel que quiera escuchar
lo digo con emoción,
como...

Andy Alfonso


Viejas tardes de verano, donde la nostalgia queda alojada detras de los últimos rayos de sol que se esconden detras del rojizo de las aguas iluminadas con el recuerdo de tu mirada, mis suspiros acari...

muza



VESTIDURAS

CIERTO DÍA BELLEZA Y FEALDAD SE ENCONTRARON A ORILLAS DEL MAR, Y SE DIJERON BAÑÉMONOS EN EL MAR.
ENTONCES SE DESVISTIERON Y NADARON EN LAS AGUAS.
INSTANTES MAS TARDES FEALDAD REGRES...

khalil


Así Era

Canta, me dices. Y yo canto.
¿Cómo callar? Mi boca es tuya.
Rompo contento mis amarras,
dejo que el mundo se me funda.
Sueña, me dices. Y yo sueño.
¡Ojalá no soñara nunca!
No recordar...

José Hierro


El Espejo

Con los ojos vendados nos miramos
cada día delante de un espejo
para ser solo imágenes
nuestras que no veremos.

Desfilamos, retratos fidelísimos,
copias exactas, calcos o reflej...

Leopoldo de Luis

confundidos por el bramido de las aguas


Oh que verdes son las ramas del sauce en las aguas que pasan.

Uejima Onitsura

confundidos por el bramido de las aguas


La sinfonía sacra de los seres, los vientos, los bosques y las aguas, en el lenguaje mudo de tus ojos que, mirándome, hablan.

Almafuerte

confundidos por el bramido de las aguas


La pradera esta nublada Y las aguas guardan silencio. Es el atardecer.

Yosa Buson

confundidos por el bramido de las aguas


Aguas termales.La Vía láctea en los cuerpos desnudos.

Shiki Masaoka

confundidos por el bramido de las aguas


No nos hagáis beber, ¡oh!, no, esas aguas minerales, benditas o lustrales, sino buen vino, ¡por lo que más queráis!.

George Brassens


Con lo que odio las aguas quietas, digo, me exaspera la gente sosegada: la que arrulla que te arrulla el sueño de que el tiempo pasado fue mejor; la que no dice, ¡ejem!, esta boca es mía, este paí...

Francisco Morales Santos


Nostalgia de Mujer

Mil años ante Ti son como sueño.
Como de aguas el grosor de una avenida.
Hierba que en la mañana crece,
florece y crece en la mañana
aunque a la tarde es cortada y se seca.

¿...

Carmen Conde


Canciones

Cántame tus canciones,
tus esbeltas, desnudas canciones,
esas que se visten de menudas hojas verdes
y hojas rojas,
y hojas verdidoradas,
con cortezas resinosas
y pequeñas piedras pulidas ...

Aurelio Arturo


La Última Costa

Había una barcaza, con personajes torvos,
en la orilla dispuesta. La noche de la tierra,
sepultada.
Y más allá aquel barco, de luces mortecinas,
en donde se apiñaba, con fervor, ...

Francisco Brines

confundidos por el bramido de las aguas


Nuestra pasión fue un trágico sainete en cuya absurda fábula lo cómico y lo grave confundidos risas y llanto arrancan.

Gustavo Adolfo Bécquer



Ceniza

Solo aguas en tregua
nacidas para ser ceniza múltiple del viento.

Ya ves qué paradoja
amor, qué despropósito,

quería ser ave fénix,
amor, qué engaño,
qué fraude sustentaba mi proyec...

Amalia Iglesias

confundidos por el bramido de las aguas


Aquí agua y allá agua. Las aguas de la primavera.

Uejima Onitsura

confundidos por el bramido de las aguas


El dragón inmóvil en aguas profundas se convierte en presa de los cangrejos.

Proverbio Chino


Solo Tenemos Un Beso

Beso indeleble, beso insuficiente,
compendio de inseguras realidades
y perspectivas de fugacidades,
entre ayer y mañana estrecho puente.

A tu vida amarrada, dependiente
...

Francisco Alvarez


Es adagio que río que crece de súbito, crece con aguas turbias. Y el torrente estruendoso deslumbra, se despeña, salta, devasta,-- más no hace buenas las tierras comarcanas, como el agua serena de...

José Martí

confundidos por el bramido de las aguas


La luz irrumpe donde ningún sol brilla, donde no se alza mar alguno, las aguas del corazón impulsan sus mareas.

Dylan Thomas


Oh Aquellos Días Claros...

Oh aquellos días claros de mi niñez, aquellos
días entre jardines, entre libros y sueños,
a qué poco han quedado reducidos: las piedras
brillantes al sol alto del dul...

Alfonso Canales


Para Un Esteta

Tú que hueles la flor de la bella palabra
acaso no comprendas las mías sin aroma.
Tú que buscas el agua transparente
no has de beber mis aguas rojas.

Tú que sigues el vuelo de la ...

José Hierro


Eras, Instante, Tan Claro...

Eras, instante, tan claro.
Perdidamente te alejas,
dejando erguido al deseo
con sus vagas ansias tercas.

Siento huir bajo el otoño
pálidas aguas sin fuerza,
mientras s...

Luis Cernuda


Inundación

El río trajo troncos y lúbricos helechos:
la creciente mantuvo mi memoria anegada.
La inundación es gris. La niebla húmeda nada
entre ruinas y patos y lúgubres desechos.

Mundos roto...

Efraín Bartolomé


La Rosa

La imagen del amor como una rosa
abre sus encendidas ilusiones
y sobre el tallo esbelto resplandece
su oscura primavera deseada;
el naciente reflejo de su sombra
nubla el claro contorno de la...

Juan Gil-Albert


Una Oscura Pradera Me Convida

Una oscura pradera me convida,
sus manteles estables y ceñidos,
giran en mí, en mi balcón se aduermen.

Dominan su extensión, su indefinida
cúpula de alabastro se r...

José Lezama Lima


Deslumbramiento

Era lirio en el aire y fragancia en el viento;
ondas sobre las aguas y temblor en el río;
cuando vi su hermosura, con todo el pensamiento,
grabé su amado nombre para llamarlo mío.
...

Dora Castellanos


Mientras tú ardas junto al mar

Mientras tú ardas junto al mar,
Fuego,
Mientras levantes tu columna viva, dorada, real,
Fuego,
Mientras, como un árbol, crezcas en medio de la noche,
alegrán...

Roberto Fernández Retamar