Camilo jose cela los hombres. Encuentra docenas de camilo jose cela los hombres con fotos para copiar y compartir.
Es mejor y más sano para el alma, se dijo hace ya tiempo, gastarse que enmohecerse.
La libertad es una sensación. A veces puede alcanzarse encerrado en una jaula, como un pájaro
Vivimos en la dictadura del funcionario, que no defiende la idea sino la nómina; lo que siempre da mayores arrestos.
La castidad enmohece.
Ideas? Mi cabeza está llena de ellos, uno después del otro, pero no sirven para nada allí. Ellos deben ponerse en un papel, uno tras otro.
Mienten los que quieren disfrazar la vida con la máscara loca de la literatura.
La inspiración es trabajar una buena porción de horas.
-Lo que yo quiero -decía don Nicolás a su sobrino Pedrito, que hacía unos versos muy finos y estudiaba Filosofía y letras- es una cachonda con arrobas que me haga gozar, ¿me entiendes?, una tía ...
El nacionalista cree que el lugar donde nació es el mejor lugar del mundo; y eso no es cierto. El patriota cree que el lugar donde nació se merece todo el amor del mundo; y eso sí es cierto.
Seguimos en las mismas inútiles resignaciones... Es grave confundir la anestesia con la esperanza...
El humor es la gran coraza con la que uno se defiende en este valle de lágrimas
No usemos la lengua para la guerra, y menos para la guerra de las lenguas, sino para la paz, y sobre todo para la paz entre las lenguas. De la defensa de la lengua, de todas las lenguas, sale su forta...
Para el éxito sobra el talento; para la felicidad, ni basta
No hay fórmula más eficaz para que una idea germine, que la de bañarla en sangre o cerrarla bajo siete llaves.
Celestino se queda perplejo, sin saber qué hacer. Piensa romperle un sifón en la cabeza, por fresco, pero se acuerda: Entregarse a la ira ciega es señal de que se está cerca de la animalidad. Quit...
La polisemia de nación lleva lastrando la capacidad de ponerse de acuerdo acerca del futuro del reino de España desde el momento mismo en que se aprobó la Constitución de 1978.
La muerte es de una vulgaridad absoluta; todos los nacidos terminan pasando por ella.
Una huelga de intelectuales, que es un supuesto improbable, paralizaría la marcha del mundo.
Es grave confundir la anestesia con la esperanza; también lo es tomar el noble rábano de la paciencia por las ruines hojas lacias, ajadas, trémulas- de la renunciación.
En el servicio aprendió a leer, a escribir y a sumar, y perdió la inocencia. Abrió la tahona, se casó, tuvo doce hijos, compró un calendario y se sentó a ver pasar el tiempo. Los patriarcas anti...
No hay violencia admisible aun la violencia puesta al servicio de la causa justa, concepto que el ser humano puede creer pero no precisar.
El argot, hijo mío, es un poco ese pariente tarambana a quien todos envidian y todos fingen despreciar.
Las mujeres están para ser gustadas. Después, unas se dejan, otras no... Eso va ya por provincias.
Un carallo a tiempo es una victoria dialéctica
Cuando viajo, lo que más me interesa es la gente, porque solo hablando con ella se conoce el ambiente.
La mañana, esa mañana eternamente repetida, juega poco, sin embargo, a cambiar la faz de la ciudad, ese sepulcro, es cucaña, es colmena... ¡Que Dios nos coja confesados!
La Filo llora mientras dos de los hijos, al lado de la cama, miran sin comprender: los ojos llenos de lágrimas, la expresión vagamente triste, casi perdida, como la de esas terneras que aún alienta...
Es grave confundir la anestesia con la esperanza.
La historia tiene ya el número de páginas suficientes para enseñarnos dos cosas: que jamás los poderosos coincidieron con los mejores, y que jamás la política (contra todas las apariencias) fue ...
Volqué el arca en la bolsa, la despensa en la alforja y el lastre de los malos pensamientos en el fondo del pozo y, aprovechándome de la noche como un ladrón, cogí el portante, enfilé la carreter...
La fidelidad a los demás, si no coincide, como una moneda con otra moneda, con la violenta y propia fidelidad al dictado de nuestra conciencia, no es maña de mayor respeto que la disciplina ? o los ...
Que no hay peor odio que el de la misma sangre, [... ], porque a nadie se odia más con más intensos bríos que a aquello a que uno se parece y uno llega a aborrecer el parecido.
La idea de la muerte llega siempre con paso de lobo, con andares de
culebra, como todas las peores imaginaciones. Nunca de repente llegan
las ideas que nos trastornan; lo repentino ahoga unos mo...
A la sociedad, para ser feliz en su anestesia (las hojas del rábano de la esperanza), le sobran los escritores.
No hay más goces reales en el mundo que el amor fiel de la casa, y la amistad en los pocos hombres buenos.
Los hombres no viven juntos porque sí, sino para acometer juntos grandes empresas.
No es que los hombres hacen los pueblos, sino que los pueblos, con su hora de génesis, suelen ponerse, vibrantes y triunfantes en un hombre.
Hay algunos hombres que no dicen lo que piensan y otros que piensan demasiado lo que dicen.
La conciencia es el mejor juez que tiene un hombre de bien.
La política es bella, aunque parezca fea por lo que se le entra del interés inevitable; y su beldad está en la fatiga difícil y dolorosa de los hombres en virtud por tener la república a salvo de...