El gato y el perro. Encuentra docenas de el gato y el perro con fotos para copiar y compartir.
El perro que no es de raza, si no tiene hambre no caza.
El perro de buena raza hasta la muerte caza.
Nadie apalea a un perro muerto.
Un perro sabe donde se tira comida.
El ego es como tu perro. El perro tiene que seguir al amo y no el amo al perro. Hay que hacer que el perro te siga. No hay que matarlo, sino que domarlo.
A otro perro con ese hueso.
Nosotros, perros de casa, hemos matado a la liebre, dice el perro faldero.
Todos los hombres son dioses para su perro. Por eso hay gente que ama más a sus perros que a los hombres.
¿Sabe un perro que va a morir?
Más pronto o más tarde todos somos el perro de alguien.
Al perro que tiene dinero se le llama señor perro.
Vale más un fiero león delante de uno que un perro traidor detrás.
A perro que no conozcas, nunca le espantes las moscas.
Muerto el perro, se acaba la rabia.
Fuera del perro, un libro es probablemente el mejor amigo del hombre. Y dentro del perro probablemente está demasiado oscuro para leer.
La teología nunca ha sido de gran ayuda, es como buscar, a medianoche y en un sótano oscuro, a un gato negro que no está ahí.
El perro y el niño, donde ven cariño.
Perro viejo no ladra en vano.
A mi perro pimperl dele usted una porción de tabaco español, un buen pan y tres besitos.
Más hace el lobo callando que el perro ladrando.
El cielo se gana por favores. Si fuera por méritos usted se quedaría afuera y su perro entraría.
El perro permanece perro, aunque sea criado entre leones.
Nunca convencerás a un ratón de que un gato negro trae buena suerte.
A perro flaco todo son pulgas.
Por dinero baila el perro, y por pan, si se lo dan.
Quien da pan a perro ajeno, pierde el pan y pierde el perro.
Un perro hambriento solo tiene fe en la carne.
De pequeño quise tener un perro, pero mis padres eran pobres y solo pudieron comprarme una hormiga.
El perro del hortelano, que no come las berzas ni las deja comer a su amo.
El que un perro haya mordido a un hombre no es ninguna noticia; una noticia es el que un hombre haya mordido a un perro.
Todo lo que una mujer quiere de verdad - un perro, un hombre, Dios, cualquier cosa - lo quiere como a un hijo.
Medite al atardecer, mirando las estrellas y acariciando a su perro, es un remedio infalible.
Gato escaldado, del agua fría huye.
En la vida hay que ser sincero. Mi padre me enseñó que lo más importante es ser verdadero y no meterle gato por liebre a nadie. Conservar lo que uno es, con sus defectos. Y escribir lo que uno es.
Fuera del perro, el libro es el mejor amigo del hombre. Dentro del perro, quizá esté muy oscuro para leer.
El amor entre un hombre y un perro es un idilio.
Dios creó al gato para que el hombre pudiera acariciar al león.
Dijo el perro al hueso: "Si tú estás duro, yo tengo tiempo".
Quien quiere ahogar a su perro dice que está rabioso.
Que un hombre se levantó y dijo: He aquí, ésta es la verdad, y al instante percibo un gato de arena hurtando un trozo de pescado en el fondo. Mira, te has olvidado el gato, digo yo.