Colecci髇 de paco

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Lo Que Necesito de Ti

No sabes c贸mo necesito tu voz;
necesito tus miradas
aquellas palabras que siempre me llenaban,
necesito tu paz interior;
necesito la luz de tus labios
! Ya no puedo... seguir as铆 !
...Ya... No puedo
mi mente no quiere pensar
no puede pensar nada m谩s que en ti.
Necesito la flor de tus manos
aquella paciencia de todos tus actos
con aquella justicia que me inspiras
para lo que siempre fue mi espina
mi fuente de vida se ha secado
con la fuerza del olvido...
me estoy quemando;
aquello que necesito ya lo he encontrado
pero a煤n !Te sigo extra帽ando!

Mario Benedetti

Las preocupaciones acaban por comerse unas a otras, y al cabo de diez a帽os, se da uno cuenta de que se sigue viviendo.

Jean Anouilh

La moral es la espina dorsal de los imb茅ciles.

Fracis Picabia

Avergu茅nzate de morir antes de haber conseguido alguna victoria para la humanidad.

Horace Mann

Tales obres son como espejos: si se mira un mono es imposible que refleje un hombre.

Georg Christoph Lichtenberg

Nuestros sufrimientos son caricias bondadosas de Dios, llam谩ndonos para que nos volvamos a 脡l, y para hacernos reconocer que no somos nosotros los que controlamos nuestras vidas, sino que es Dios quien tiene el control, y podemos confiar plenamente en 脡l.

Madre Teresa de Calcuta

Cuando miro a una persona a los ojos y veo en ellos su coraz贸n, intuyo que somos algo m谩s que materia.

Pacoyo

La tecnolog铆a no nos ahorra tiempo, pero si lo reparte de otra manera.

Helman Nahr

El mismo sol no ve hasta que el cielo se aclara.

William Shakespeare

El hallazgo afortunado de un buen libro puede cambiar el destino de un alma.

Marcel Pr茅vost

M谩s vale un grano de cordura que arrobas de sutileza.

Baltasar Graci谩n

El secreto de un buen jugador es saber descubrir que espera el otro, y saber hacer creer que va a obtenerlo.

Ken Burns

10. Unas Manos Que Huelen A Crep煤sculos...

Unas manos que huelen a crep煤sculos,
-de nuevo el verde olvido de la noche-,
la oblicua soledad llena canastos ateridos,
la oscuridad de todo gesto y sus meandros,
grietas en las 谩speras flores de la duda.

Con sus manos recorr铆a la lluvia y sus acacias,
las angostas colinas de la luz,
crucigramas sin destino en los rumores de su piel.
Con cintura hu茅rfana de fr谩giles bellezas
abraz贸 la herrumbre de todos los silencios.

Salteador de eternidades, tus s煤bitos volcanes
perfilan camino largo en versos y sortilegios,
hasta llegar al alba en las v铆sceras de la ternura.

De "La lealtad del espejo" 1993

Beatriz Hernanz

La felicidad no consiste en adquirir y gozar, sino en no desear nada, pues consiste en ser libre.

Epicteto

Todo lo debil es viejo, todo lo fuerte es joven.

Cristina de Suecia

Dios os ha dado una cara y vosotros os hac茅is otra.

William Shakespeare

La voz de la persona amiga es la nota m谩s suave en la orquesta de la vida.

Roque Schneider

Descuidar al hombre, especular sobre la naturaleza, es comprender mal los hechos del Universo.

Hsun-Tse

Nunca crea nada hasta que no haya sido negado oficialmente.

Claud Cockburn

Siempre hay un momento en la infancia en el que se abre una puerta y deja entrar al futuro.

Graham Greene