Ideales de george washington ( 4 )
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Las atrocidades no lo son menos si ocurren en laboratorios y se llaman investigación biomédica.

No permitiré que ningún hombre reduzca y degrade mi alma haciéndome que lo odie.

Si la libertad significa algo, será, sobre todo, el derecho a decirle a la gente aquello que no quiere oÃr.

Y he aquà la muerte, la muerte que siempre vuelve a empezar...
Veneré a rudyard kipling a los 13 años, lo aborrecà a los 17, lo disfruté a los 20, lo desprecié a los 25, y ahora de nuevo lo admiro bastante. Lo único que nunca pude hacer fue olvidarlo.

He realizado observaciones y experimentos en el espacioso laboratorio del mundo con una maravillosa máquina portátil perfectamente ajustada en mi cabeza.

La vida es siempre amor y miseria. La vida son siempre las mismas canciones.
En mi pueblo, sin pretensión, tengo mala reputación. Haga lo que haga es igual todo lo consideran mal. Yo no pienso, pues, hacer ningún daño queriendo vivir fuera del rebaño. No, a la gente no gu...

El hecho que un creyente pueda ser más feliz que un escéptico es tan cierto como decir que el borracho es más feliz que el hombre sobrio.

Al mirar hacia atrás, el crÃtico ve la sombra de un eunuco. ¿Quién serÃa crÃtico si pudiera ser escritor?.

Los espejos se emplean para verse la cara, el arte para verse el alma.

Los recuerdos son los cabellos blancos del corazón.

Todo en el mundo es material y, de acuerdo con la ley universal, todo está en movimiento y constantemente está siendo transformado.

La estadÃstica es una ciencia que demuestra que si mi vecino tiene dos coches y yo ninguno, los dos tenemos uno.

Leyendo una biografÃa, recordad que la verdad no se presta nunca a una publicación.

El recuerdo es el perfume del alma.

El estado ideal no es aquel en que cada uno tiene acceso a la misma cantidad de riqueza, sino en proporción a su contribución a la riqueza general.

Dios ha puesto el placer tan cerca del dolor que muchas veces se llora de alegrÃa.

Aprendemos de la experiencia que los hombres nunca aprenden nada de la experiencia.

Amad. Es el único bien que hay en la vida.

¿Qué hombre inteligente si le dieran a elegir escoger entre vivir sin rosas o vivir sin berzas no correrÃa a asegurar las berzas?

Nadie puede ser sensato con el estómago vacÃo.

No busquemos solemnes definiciones de la libertad. Ella es solo esto: Responsabilidad.

La ley de la sociedad es cada uno para todos y todos para cada uno.

El que no es bello a los veinte, ni fuerte a los treinta, ni rico a los cuarenta, ni sabio a los cincuenta, nunca será ni bello, ni fuerte, ni rico, ni sabio.

A los empresarios les gustan las asambleas porque ellos las inventaron.

Debes perder una mosca para pescar una trucha.

Cuando un amigo nos pide algo, la palabra "mañana" no existe.

Nuestras acciones hablan sobre nosotros tanto como nosotros sobre ellas.

La volubilidad de la mujer a quien amo es splo comparable a la infernal constancia de las mujeres que me aman.

¡Dejadme escapar de la mentirosa y criminal ilusión de la felicidad! Dadme
trabajo, cansancio, dolor y entusiasmo.

La civilización es una carrera entre la educación y la catástrofe.

Ama a tu vecino, pero no derribes vuestra verja.

El tiempo no duerme los grandes dolores, pero sà los adormece.

Las sociedades no mueren de la cúspide a la base, sino de la base a la cúspide.

La belleza exterior no es más que el encanto de un instante. La apariencia del cuerpo no siempre es el reflejo del alma.

Las elecciones, a veces, son la venganza del ciudadano. La papeleta es un puñal de papel.

Hay que mejorar la condición femenina. Las cocinas son demasiado pequeñas, los fregaderos demasiado bajos y el mango de las cacerolas está mal aislado.
Cuando Se Vive Al Borde
Cuando se vive al borde
de una ciudad de conmovidas piedras-
a la que obviaron un destino
de naufragio y ceguera
y el invierno -que agobia oscuramente-
es la pared de su verdÃ...

Una frase puede cambiar un destino.