Colección de jose
¿ No tendrÃa que ser yo un barril de memoria si pretendiese llevar conmigo hasta mis razones?.
Friedrich NietzscheUna de mis grandes ideas habÃa sido la unión, la concentración de los mismos pueblos geográficos que se disuelven y dividen. Me hubiera gustado hacer de estos pueblos un solo y mismo cuerpo nacional, con un cortejo tal hubiera sido bello avanzar hacia la bendición de los siglos. Yo me sentÃa digno de tal gloria.
Napoleón BonaparteQuien me tiene de un hilo no es fuerte; lo fuerte es el hilo.
Antonio PorchiaPara Un Esteta
Tú que hueles la flor de la bella palabra
acaso no comprendas las mÃas sin aroma.
Tú que buscas el agua transparente
no has de beber mis aguas rojas.
Tú que sigues el vuelo de la belleza, acaso
nunca jamás pensaste cómo la muerte ronda
ni cómo vida y muerte -agua y fuego- hermanadas
van socavando nuestra roca.
Perfección de la vida que nos talla y dispone
para la perfección de la muerte remota.
Y lo demás, palabras, palabras, y palabras,
¡ay, palabras maravillosas!
Tú que bebes el vino en la copa de plata
no sabes el camino de la fuente que brota
en la piedra. No sacias tu sed en agua pura
con tus dos manos como copa.
Lo has olvidado todo porque lo sabes todo.
Te crees dueño, no hermano menor de cuanto nombras.
Y olvidas las raÃces ( «Mi Obra», dices ), olvidas
que vida y muerte son tu obra.
No has venido a la tierra a poner diques y orden
en el maravilloso desorden de las cosas.
Has venido a nombrarlas, a comulgar con ellas
sin alzar vallas a su gloria.
Nada te pertenece. todo es afluente, arroyo.
Sus aguas en tu cauce temporal desembocan.
Y hechosa un solo rÃo os vertéis en el mar
«que es el morir», dicen las coplas.
No has venido a poner orden, dique. Has venido
a hacer moler la muela con tu agua transitoria.
Tu fin no está en ti mismo ( «Mi Obra», dices ), olvidas
que vida y muerte son tu obra.
Y que el cantar que hoy cantas será apagado un dÃa
por la música de otras olas.
El mal que hacemos no nos atrae tanta persecución y tanto odio como nuestras buenas cualidades.
Francisco de La RochefoucauldEn cuestiones de ciencia, la autoridad de mil no vale lo que el humilde razonamiento de un solo individuo.
Galileo GalileiTratarse mal sin enfadarse es una de las mayores delicadezas de la verdadera amistad. Que puede ser superada por otra delicadeza: la de tratarse siempre bien.
Noel ClarasóLa tragedia de la edad no es ser viejo, sino que se sea joven y la gente no lo vea.
Andrés SegoviaLa realidad es aquello que, cuando dejas de creer en ella, no desaparece.
Philip DickCada poema es único. En cada obra late, con mayor o menor grado, toda la poesÃa. Cada lector busca algo en el poema. Y no es insólito que lo encuentre: ya lo llevaba dentro.
Octavio PazA la intemperie, se va infiltrando el viento hasta mi alma.
Matsuo BashoGran tormenta mucho espanta, pero pronto pasa.
RefránLa soledad es la causa de muchos excesos de la teorÃa del conocimiento.
Juan BenetLa rectitud de la razón no es congénita.
Gastón BachelardVirtud es la alegrÃa que alivia el corazón más grave y desarruga el ceño de catón.
Antonio MachadoDevuélveme mis ojos largamente descarriados,pues es ya mucho el tiempo que han estado sobre ti.
John Donne¿Te has parado alguna vez a ver los colores que estallan en Madrid cuando, al salir del metro en una tarde otoñal, el sol se va?.
JoaquÃn SabinaSi sos escritor te colocas detrás de una pared de silencio y sin importar lo que estés haciendo, manejando o caminando o haciendo tareas domésticas... aún asà podés estar escribiendo, porque tenés ese espacio.
Joyce Carol OatesEn el paÃs de las palmeras se alimenta el asno de dátiles.
Proverbio árabeEl amor y la poesÃa me embriagan, inocentemente, como al tigre la sangre.
Fernando Arrabal