Arena del desierto. Encuentra docenas de arena del desierto con fotos para copiar y compartir.
Las reglas de los Juegos del Hambre son sencillas: en castigo por la rebelión, cada uno de los doce distritos debe entregar a un chico y una chica, llamados tributos, para que participen. Los veintic...
Que la vida es inmortal mientras se vive, mientras se está con vida. Que la inmortalidad no es una cuestión de más o menos tiempo, que no es una cuestión de inmortalidad, que es una cuestión de o...
Unidos Por La Luz
Bajo una misma luz
están nuestras cabezas.
Tu corazón y el mío
cantan sobre las piedras
cuando la noche oculta
los rugidos de fieras.
¿Tu corazón y el mío eran solo de arena...
Desierto Sájara
Sí. Yo tuve un mar sobre mi arena.
Un mar grande sin límites, compacto.
La tierra de oro que abrasa soledades
estuvo henchida augusta del mar que ya no soy.
Picaban gaviotas mi cu...
Lo bello del desierto es que en algún lugar esconde un pozo.
Cada uno somos un desierto.
Me dejaron de pronto en medio de un desierto poblada de signos invisibles.
El que no quiera vivir sino entre justos, viva en el desierto.
Dios creó el desierto para que el hombre pudiera sonreir al ver las palmeras.
Sin la amistad, el mundo es un desierto.
Casida Del Sediento
Arena del desierto
soy, desierto de sed.
Oasis es tu boca
donde no he de beber.
Boca: Oasis abierto
a todas las arenas del desierto.
Húmedo punto en medio
de un mundo abrasador...
La arena del desierto es para el viajero fatigado lo mismo que la conversación incesante para el amante del silencio.
Y Después Fue El Olvido...
(Ante la casa de don Francisco de Quevedo)
Y después fue el olvido. Fue la espiga
mártir del sol, esclava de la avena.
Fue enterrada en el polvo la azucena,
mancillada ...
Normalmente siguen la vida sin pensar, miran siempre adelante. Quizá sea tiempo de despertar y mirar el coche que sigue en la ruta.
Normalmente en un instante ya antes determinado, caen al suelo, si...
Miren, traidores y contemplen, asómbrense y quédense alelados, porque yo voy a realizar en su época una hazaña tan extraordinaria, que si no se la hubieran contado no la creerían. Pues yo soy qui...
Si usted pone el gobierno federal a cargo del desierto del Sáhara, en 5 años que habría una escasez de arena.
La Guía del autoestopista galáctico tiene varias cosas que decir respecto a las toallas. Dice que una toalla es el objeto de mayor utilidad que puede poseer un autoestopista interestelar. En parte, ...
Una multitud es como un vasto desierto de hombres.
Buscar el yo en el poderío del oro es edificar sobre arena.
Soy agua que arrasa los caminos, turbulencia de duna en el desierto.
La omnipotencia ha hecho del león un animal del desierto.
Escribe en la arena las faltas de tu amigo.
Lo que embellece al desierto es que en alguna parte esconde un pozo de agua.
La vida está compuesta de insignificancias; el año de instantes y las montañas de granos de arena. Por lo tanto no subestimes nada, por pequeño que te parezca.
El desierto no tiene moral. Por eso, nada de lo que te ha enseñado la sociedad te sirve cuando te enfrentas a él.
Dígame si no es hermoso, compañera, demostrar que muchos granos de arena pueden contener al mar.
A la rapiña, el asesinato y el robo los llaman por mal nombre gobernar y dónde crean un desierto, lo llaman paz
Donde no está el hombre, la naturaleza es un desierto.
Es solo un trabajo. La hierba crece, los pájaros vuelan, las olas golpean la arena. Yo golpeo a la gente.
Que un hombre se levantó y dijo: He aquí, ésta es la verdad, y al instante percibo un gato de arena hurtando un trozo de pescado en el fondo. Mira, te has olvidado el gato, digo yo.
A orillas del amor, del mar, de la mañana, en la arena caliente, temblante de blancura, cada uno es un fruto madurando su muerte.
¿Cuántos caminos tiene que andar un hombre antes de que le llaméis hombre? ¿Cuántos mares tiene que surcar la paloma blanca antes de poder descansar en la arena?
Hemos construido catedrales inmovibles en la arena.
La desgracia crea en ciertas almas un vasto desierto en el que resuena la voz de Dios.
Fue a la vera del mar, a medianoche. Supe que estaba Dios, y que la arena y tú y el mar y yo y la luna éramos Dios. Y lo adoré
Ni el libro ni la arena tienen ni principio ni fin.
Ríos, montes y bosques, soledades amadas, solo un ser está ausente y todo es un desierto.
Ella dice que deberían llegar a vivir como lo hacen, con el cuerpo cansado en un desierto; en el espíritu, el recuerdo de un solo beso, de una sola palabra, de una sola mirada para todo un amor
Lo que da belleza al desierto es que esconde un pozo de agua en alguna parte.
No sé si se entenderá el término caer por su propio peso; imaginen una estatua hecha de mierda que se hunde lentamente en el desierto: bueno, eso es caer por su propio peso.