Frases cortas de miedo a perder a un amor ( 94 )
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Soy poco a poco. Mi historia es vivir. Y no tengo miedo del fracaso. Aunque el fracaso me aniquile quiero la gloria del caer.

Cuando duermes, tu Padre celestial te cuida con amor. El sueño es un regalo de Dios, y aceptar ese regalo es un acto de confianza. Él restaura tu cuerpo y tu energía mediante el sueño.

¿Cómo sabes que es el amor? Sabes que es amor cuando solo quieres estar con esa persona, y cuando más o menos crees que la otra persona siente lo mismo por ti.

Los que son amados no pueden morir,
Porque amor significa inmortalidad.

Cuanto más viejo me hago más propenso a creer que si el amor ha de juzgarse por sus efectos visibles, se parece más al odio que a la amistad.

Lo primero y lo último que se le pide al genio es amor a la verdad.

Dejame entrar
A tu vida y a tu corazon
Que yo quiero solo darte amor

Debemos ser en extremo cuidadosos De la semilla que nuestra mano sembrará; El amor del amor germinará, El odio del odio crecerá?.

Yo, sin embargo, estoy limpio, no tengo miedo a ningún mediocre.

Soy el remedio sin receta y tu amor mi enfermedad

Si el amor persiste pese al dolor de las diferencias, hay que preservarlo como una joya rara

El amor es una apuesta, insensata, por la libertad. No la mía, la ajena.

Y un día comprobó con sorpresa que hacía el amor con la luz encendida pero que cerraba los ojos. Hacía el amor y recordaba.

Nosotros no tenemos miedo. No estamos buscando vivir o escapar.

Supera a los demonios con una cosa llamada amor.

Hay muchas cosas de las que nos desprenderíamos si no tuviéramos miedo de que otros las recogieran.

Cada vez escribo más historias de amor, será porque cada vez ligo menos.

Jugaban ingenua y burlonamente al amor, sin sospechar lo más mínimo que eran cómo actores que, en broma, habrían al día siguiente de representar una tragedia
Es de los demás de los que hay que tener miedo, de los que te dejan adivinar hacia qué lado están mirando. Ésos son los que siempre miran en la dirección contraria a la que tú te imaginas.

Y es que el amor -lo que se dice amor- / llega muy pocas veces, aunque se obstinen tantos / en convertir el aureus en moneda corriente...

No he tenido mucha suerte con el 1 y con el 3, me caí en Benidorm y me hice mucho daño ese día, por eso tengo miedo a ese número, prefiero el 12 + 1.

El amor es inventivo hasta el infinito

Cazador: si vas de caza
Por los montes del Señor,
Teme que a los pájaros venguen
Hondas heridas de amor.

Siento miedo al pensar que esta complicidad algún día vaya a terminar, miedo a no volver a ver tus ojos desvistiéndome como lo hacen cada anochecer

Pensar y amar son cosas distintas. El pensamiento en sí mismo es inaccesible al amor.

Todos quieren con ardiente amor a la humanidad, mientras permanecen encerrados en la soledad de sus propias casas.

El amor, si lo había, era una cosa aparte: otra vida.

Te di mi corazón y tú lo regalaste, te di todo el amor que pude darte y me robaste

Mi mente reaccionaba igual que una película fotosensible a la emoción donde el amor y la muerte podían imprimirse en el mismo segundo.

Lila era de una belleza casi fea, de esas que encanta a los hombres, pero que también les da miedo.

Quería volver a ver la plaza de Ljubljana, sentir odio y amor, desesperación y tedio, todas esas cosas sencillas y banales que forman parte de lo cotidiano y dan sabor a la existencia.

La visión te otorga propósito y significado. El amor te concede emociones vibrantes y una pasión duradera. La aspiración te proporciona un desafío que tardarás años en cumplir.

Aceptamos el amor que creemos merecer.

Quizá porque el amor ha construido con paciencia y fervor su telaraña, donde el odio que cae está perdido.

Hay persona que dicen que representan a Cristo, pero predican en contra del amor... Por ejemplo, predicar en contra de la homosexualidad es una blafesmia.

Es una gran cosa amar y ser amado. El amor no es algo que pueda ser desaprovechado.
No me debes nada por darte el amor que te doy, no me debes nada por importarme de la forma en que me has importado. Te doy gracias por recibir, el privilegio es mío. Y tú no me debes nada a cambio.

No era fácil distinguir la claridad del miedo. Y tal vez la mejor solución consistiría en guardar, como siempre, una actitud decorosa e impasible.

Tengan miedo
si quieren que despierte en ustedes el instinto
de lo Bello.

El matrimonio no he llegado a entenderlo, pero el amor sí.