Frases de aceptar la realidad. Encuentra docenas de frases de aceptar la realidad con fotos para copiar y compartir.
La gran bendición de la vida es el mañana, y hacer realidad tus sueños.
Desprenderse de una realidad no es nada: lo heroico es desprenderse de un sueño.
La gente te pide críticas, pero en realidad solo quiere halagos.
La única verdad es la realidad.
La realidad es aquello que, cuando dejas de creer en ella, no desaparece.
En la música todos los sentimientos vuelven a su estado puro y el mundo no es sino música hecha realidad.
Sostengo que quien infringe una ley porque su conciencia la considera injusta, y acepta voluntariamente una pena de prisión, a fin de que se levante la conciencia social contra esa injusticia, hace g...
Dijo Platón que los buenos son los que se contentan con soñar aquello que los malos hacen realidad.
Sin duda, no hay cacería como la caza de hombres y aquellos que han cazado hombres armados durante el suficiente tiempo y les ha gustado, en realidad nunca se interesarán por nada más.
En realidad, los seguros de vida son seguros de muerte.
La televisión debe evitar el presentar siempre la realidad color de rosa.
Si no se casan con la realidad, las ideas tienen poca descendencia.
El humor es una cobardía, una huida de la realidad.
Cuando las leyes de la matemática se refieren a la realidad, no son ciertas; cuando son ciertas, no se refieren a la realidad.
La auténtica intuición artística va más allá de lo que perciben los sentidos y, penetrando la realidad, intenta interpretar su misterio escondido.
Ningún objeto se halla tan ligado a su nombre como para no aceptar otro que le convenga mejor.
Es muy grave el olvido de la historia o su deformación, porque la realidad siempre se venga del que no cuenta con ella.
Lo peor y más peligroso del que duerme es creer que está despierto y confundir sus sueños con la realidad.
Los locos no existen; solo les repugna la realidad.
La realidad es una alucinacion causada por la falta de alcohol.
La realidad baila sola en la mentira.
Mis manos son el límite seguro de toda realidad.
En todo ser humano confluyen tres: Como él se ve a sí mismo, como le ven los demás y como es en realidad.
Me da igual que mis sueños no se hagan realidad ...lo que yo quiero es que no me despierten.
CUANDO UNO QUIERE LAS COSAS EL MUNDO SE CONFABULA PARA QUE SE HAGA REALIDAD
Deja de ser quien crees ser y empieza a vivir como en realidad eres
La Realidad es un sueño cumplido
Por las noches te busco y no te encuentro,cuando mis ojos se cierran sueño contigo cosas grandiosas, despierto feliz y pienso que vale la pena correr cualquier riesgo, con tal de hacer mi sueño real...
Cuando creas que ya tienes toda la felicidad necesaria para vivir, es cuando empezaras a caer a la realidad y te das cuenta que solo es una pequeñisima parte de la porcion de felicidad que encontrar...
Crees que haces lo correcto con tu vida y por lo tanto entras en un conformismo, hasta que alguien te abre los ojos haciendote ver la realidad y diciendote que no lo has hecho todo
Vivir del recuerdo no vale la pena xq se sufre mas de la cuenta, nosotros tenemos el control de ser lo que somos aunque a otras personas no les guste, esa es la realidad...
Se puede decir que una persona es chiflada, cuando su propia realidad es una mentira todavía no pillada.
El amor es una obsesión que hay que convertirla en realidad lo más rápido que se pueda.
La unión es cercanía y el amor mucho más.
El deseo permanente y persistente de todas maneras te ayuda.
Mantiene viva la esperanza,de repente son la antesala de una realidad feliz.
La huída es señal , es luz que puede convertirse en una hermosa realidad para el que huye y para quien sufre la huída.
Pensamiento,recuerdos, deseos no bastan.
La realidad es lo que cuenta.
Tócame,soy realidad.
Todo lo que una persona pueda imaginar, otro podrá hacerlo realidad.
Las proposiciones matemáticas, en cuanto tienen que ver con la realidad, no son ciertas; y en cuanto que son ciertas, no tienen nada que ver con la realidad.
Cada uno de nosotros tiene un día, más o menos triste, más o menos lejano, en que, por fin, debe aceptar que es un hombre.