Poemas de henry fielding. Encuentra docenas de poemas de henry fielding con fotos para copiar y compartir.
A ningún hombre debe obligársele a hacer el trabajo que puede hacer una máquina.
El día de tu muerte sucederá que lo que tú posees en este mundo pasará a manos de otra persona. Pero lo que tú eres será tuyo por siempre.
Las sociedades no mueren de la cúspide a la base, sino de la base a la cúspide.
Confianza es el sentimiento de poder creer a una persona incluso cuando sabemos que mentiríamos en su lugar.
¿Cómo se puede decir a un hombre que tiene una patria cuando no tiene derecho a una pulgada de su suelo?.
Para todo problema humano hay siempre una solución fácil, clara, plausible y equivocada.
Algún día la ciencia puede llegar a tener la vida del hombre en sus manos y, haciendo estallar el mundo la especie humana puede incurrir en un suicidio colectivo.
Lee los buenos libros primero; lo más seguro es que no alcances a leerlos todos.
En amor la experiencia no cuenta para nada; porque si contase no se volvería a amar.
Los obstáculos son esas cosas espantosas que ves cuando apartas los ojos de tu meta.
Durante la juventud creemos amar; pero solo cuando hemos envejecido en compañía de otro, conocemos la fuerza del amor.
Dicen que cuando los americanos buenos mueren van a París -dijo Sir Thomas riendo... ¿En serio? ¿Y dónde van los americanos malos cuando mueren? -preguntó la duquesa. Van a América, murmuró Lor...
Sin pasión, el hombre solo es una fuerza latente que espera una posibilidad, como el pedernal el choque del hierro, para lanzar chispas de luz.
Cuando mi amigo está infeliz, voy a su encuentro; cuando está feliz , espero que me encuentre.
El secreto de mi éxito está en pagar como si fuera pródigo y vender como si estuviera en quiebra.
Adelante trabajando siempre logrando siempre buscando y aprendiendo a forjar y esperar.
Si tu llamas experiencias a tus dificultades y recuerdas que cada experiencia te ayuda a madurar, vas a crecer vigoroso y feliz, no importa cuán adversas parezcan las circunstancias.
La conciencia es una voz interior que nos advierte que alguien puede estar mirando.
La felicidad es interior, no exterior; por lo tanto, no depende de lo que tenemos, sino de lo que somos.
Era ese tipo de persona que se pasa su vida haciendo cosas que detesta para conseguir dinero que no necesita y comprar cosas que no quiere para impresionar a gente que odia.
Si nos volvemos hacia una realidad más grande, es una mujer quien nos tendrá que enseñar el camino. La hegemonía del macho ha llegado a su fin. Ha perdido contacto con la tierra.
Cuando las mujeres se besan, siempre recuerdan a los boxeadores profesionales cuando se estrechan las manos.
No hay jubilación para un artista; el arte es una forma de vida y como tal no tiene fin.
La vida es un aprendizaje de renunciamiento progresivo, de continua limitación de nuestras pretensiones, de nuestras esperanzas, de nuestra fuerza, de nuestra libertad.
Un crítico novato es coma un niño con escopeta: a menudo dispara sobre todo ser viviente que ve, pensando en su puntería y no en el dolor que causa.
Si pudiéramos profundizar en la vida intima de nuestros enemigos, encontrariamos tanta tristeza y sufrimientu que desarmarían cualquier hostilidad nuestra.
Entre todos los vestidos que yo he visto poner al orgullo, el que más me subleva es el de la humildad.
Nada muestra mejor el carácter de cada cual que su manera de portarse con los necios.
No confíes en el futuro por más placentero que sea. Deja que el tiempo pasado entierre a sus muertos. Actúa en el presente. Recuerda que si tú te ayudas, dios te ayudará.
El tablero es el mundo; las piezas son los fenómenos del Universo; las reglas del juego contituyen lo que conocemos como leyes de la naturaleza.
La bondad es el principio del tacto, y el respeto por los otros es la primera condición para saber vivir.
Cuando pensamos que el día de mañana nunca llegará, ya se ha convertido en el ayer.
La fe puede ser sucintamente definida como una creencia ilógica en que lo improbable sucederá.
Antes de dar un consejo es preciso procurar que se lo acepte, o, más bien, que se lo desee.
Hacer con soltura lo que es difícil a los demás, he ahí la señal del talento; hacer lo que es imposible al talento, he ahí el signo del genio.
Lo mejor de los grandes poetas de todos los países, no consiste en lo nacional que haya en ellos, sino en lo universal.
Todo hombre tiene sus penas secretas que el mundo no conoce. Por eso a veces acusamos de frialdad a un hombre que en realidad, solo es un hombre triste.
La mayoría de la gente tendría éxito en las pequeñas cosas si no estuviera tan preocupada por grandes ambiciones.
La inconstancia lo hecha todo a perder, ella no deja que ninguna semilla germine.
Si hay un secreto del buen éxito reside en la capacidad para apreciar el punto de vista del prójimo y ver las cosas desde ese punto de vista así como del propio.