Poemas de jean paul sartre. Encuentra docenas de poemas de jean paul sartre con fotos para copiar y compartir.
Pobre corazón
que no cerrará la herida
si al tenerla cerca
la mira y suspira...
Pobre la pasión
ahogada en un grito,
su desesperación
al saberse en agonía
sin darle sentido a lo senti...
Un vaso medio vacío de vino es también uno medio lleno, pero una mentiras a medias, de ningún modo es una media verdad.
El más bello instante del amor, el único que verdaderamente nos embriaga, es este preludio: el beso.
La amistad entre dos mujeres comienza o acaba por ser un complot contra una tercera.
Es verdaderamente libre aquel que desea solamente lo que es capaz de realizar y que hace lo que le agrada.
La vida es una tragedia para los que sienten, y una comedia para los que piensan.
La política fue en principio el arte de impedir a la gente meterse en lo que le importaba. En una época posterior agregósele el arte de comprometer a la gente a decidir sobre lo que no entiende.
Las personas no están jamás tan cerca de la estupidez como cuando se creen sabias.
Los países son como las estrellas: pueden resplandecer y brillar siglos enteros después de su extinción.
La violencia es siempre un acto de debilidad y generalmente la operan quienes se sienten perdidos.
El simulacro no es lo que oculta la verdad. Es la verdad la que oculta que no hay verdad. El simulacro es verdadero.
Existe una lógica de los colores a la cual el pintor debería adaptarse, que no es la lógica del cerebro.
Durante tu ausencia, siempre en cosas chiquitas se va el tiempo; en las tiendas y en algunas visitas.
Amar al otro es renunciar a poseerlo, incluso muerto; renunciar a que vuelva, descubrir que sigue estando ahí, en un silencio que ya no nos causa pavor, en un desierto que se hace acogedor de lo más...
El jugador de ajedrez debe trasladar sus capacidades intelectuales a otras artes como las letras y la filosofía, ya que realiza muchas más combinaciones que casi todos los autores literarios.
El hombre que no sabe correr, saltar, nadar... es como un automóvil en el que solo se emplea la primera velocidad.
Se tiene la edad que se quiere tener, y también la edad del dinero que se tiene.
Donde quiera que veáis la moderación sin tristeza, la concordia sin esclavitud, la abundancia sin profusión, decid confiadamente; es un ser venturoso el que aquí manda.
Los modales corteses hacen que el hombre aparezca exteriormente tal como debería ser en su interior.
El deporte delega en el cuerpo alguna de las virtudes más fuertes del alma: la energía, la audacia, la paciencia.
Todas las guerras son santas, os desafío a que encontréis un beligerante que no crea tener el cielo de su parte.
Un viaje es una nueva vida, con un nacimiento, un crecimiento y una muerte, que nos es ofrecida en el interior de la otra. Aprovechémoslo.
En la sociedad, el hombre sensato es el primero que cede siempre. Por eso, los más sabios son dirigidos por los más necios y extravagantes.
El arte es el reflejo del mundo. Si el mundo es horrible, el reflejo también lo es.
Es empresa vana tratar de ridiculizar a un necio rico: las carcajadas están de su parte.
La naturaleza ha hecho al hombre feliz y bueno, pero la sociedad lo deprava y lo hace miserable.
Un psiquiatra es un hombre que va al Folies Bergère y mira... a los espectadores.
La gloria o el mérito de algunos hombres es escribir bien; la de otros no escribir nada.
El gobierno tuvo su origen en el propósito de encontrar una forma de asociación que defienda y proteja la persona y la propiedad de cada cual con la fuerza común de todos.
Todo hombre tiene tres variedades de carácter: el que realmente tiene; el que aparenta, y el que cree tener.
La paz es más difícil que la guerra. Se necesitan dos para hacer una paz, y solamente uno para hacer una guerra.
Lo que consideramos como justicia es a menudo una injusticia cometida en favor nuestro.
No es nada fácil abandonar la virtud; ella atormenta durante mucho tiempo a los que la abandonan.
La libertad no es fruto que crezca en todos los climas, y por ello no está al alcance de todos los pueblos.
El teléfono de la oficina no suena en los quince primeros minutos de la jornada a menos que uno llegue tarde, y si se da el caso, suena continuamente hasta que uno se incorpora a su puesto.
En la ciencia uno se trata de explicar lo que no se sabía antes de manera que se entienda. En la literatura uno se comporta justo al contrario.
Poema de La Despedida
Te digo adiós, y acaso te quiero todavía.
Quizá no he de olvidarte, pero te digo adiós.
No sé si me quisiste... No sé si te quería...
O tal vez nos quisimos demasiad...
La gente sabe que tengo un gran amor por el cine. No solo para el cine comercial, pero para el "cine de autor". Pero para mí, dos de los grandes 'auteurs' son en realidad actores y ambos resultan ser...
Las cartas de amor se escriben empezando sin saber lo que se va a decir, y se terminan sin saber lo que se ha dicho.
Los niños adivinan qué personas los aman. Es un don natural que con el tiempo se pierde.